Los empleados de una funeraria entregaron los restos de una doña a otra familia, creyendo que era el te’ongue de un karai. La familia de la doña pide justicia.

Errar suele ser humano, más todavía ahora con los tiempos difíciles que estamos viviendo por culpa de la pandemia del coronavirus, que nos obligan a tomar protocolos sanitarios en todas las instancias de la vida cotidiana.

Justamente, en cumplimiento de las disposiciones sanitarias, puso en una situación bastante difícil a una familia que reside en la ciudad de Santa Rita, en el Alto Paraná.

La señora María Rosa (61), ciudadana rapai, pero afincada desde hace años en el Este del Paraguay, estaba internada en el Hospital Municipal “Padre Germano Lauck”, ubicado en la ciudad de Foz de Yguazú, donde falleció de una dolencia grave que le estaba aquejando.

Sus hijos empezaron a realizar los papeleos para traerla de vuelta a su Santa Rita querida, pero el cuerpo de la finada no estaba en la morgue. En su lugar hallaron el cuerpo de un karai de 78 años que había fallecido de coronavirus. Los restos mortales de la kuñakarai habían sido entregados a la familia del karai muerto para sepultarla en el cementerio de Foz. “Lo único que pedimos es que nos ayuden, queremos justicia, toda la gente que la quería era solo enterrarla, solo queremos que nos entreguen a nuestra mamá”, declaró entre sollozos Daiana de Carvalho, hija de la señora fallecida, al medio G1 rapai.

Upéi pidió que se le entregue lo más rápido posible los restos de su mamita, “a nosotros nos gustaría poder despedirnos de ella, con toda mi gente, poder llevarla a Santa Rita”, gatilló la hija.

HABÍA UNA BOLSA

El empleado de la funeraria “Nuestra Señora del Rocío” entró a la morgue sin acompañamiento del personal de blanco. Allí había una bolsa mortuoria sin identificación ha upépe oiko la confusión.

YA ESTÁ ENTERRADA

El cuerpo de la kuñakarai fue enterrado en el cementerio “Jardín de San Pablo”, en el lugar que fue preparado por los deudos del finado, para el reposo eterno del señor que omano de coronavirus.

“El cuerpo de mi tía no estaba allí”

Cuando los familiares de doña María Rosa recibieron la ingrata noticia de la partida al más allá, un sobrino de la finada fue el encargado de ingresar a la morgue para el reconocimiento del cuerpo de la doña.

“Yo entré para reconocer el cuerpo en la morgue, pero solo había el cuerpo de un hombre dentro de una bolsa mortuoria. El cuerpo de mi tía no estaba allí”, he’i Marcio Batista de Carvalho.

Los directivos del hospital municipal lanzaron avei un comunicado lamentando lo ocurrido. Además, aclararon en la nota que ellos cumplieron con el protocolo sanitario de prevención del covid-19, el manejo e identificación de los fallecidos ndaje.

“Deben pedir la exhumación”, he’i

El asesor jurídico de la Municipalidad de Foz de Yguazú, Osli Machado, he’i que ellos fueron informados del cambio de los cuerpos dos días después de haber ocurrido.

“Nosotros fuimos informados el día viernes recién de lo ocurrido. La Policía Civil ya inició una investigación para apurar el caso e identificar a los responsables del error. Ahora los familiares deben pedir a la Justicia un pedido de exhumación del cuerpo de la señora para poder llevarla a Paraguay para ser enterrada en Santa Rita, a 73 kilómetros de acá, donde vive la mayoría de los hijos de la finada”, gatilló el abogado de la Muni local.