Las ganas de vivir nuevas experiencias y la crisis económica en el país “vinotinto” la trajeron a Marialba a hoy día ser la capitana solense femenil.

• POR RICARDO NÚÑEZ

Con valentía y curiosidad de la mano, y siendo toda una referente de su selección nacional, Marialba nos contó que, al presentarse la oportunidad de venir a jugar a Paraguay, no dudó y se lanzó en busca de vivir nuevas experiencias. La misma también tuvo su paso por el fútbol colombiano.

“Fui seleccionada nacional de Venezuela y allí me conoció Carlos Cáceres, uno de los delegados de la selección paraguaya. Se comunicaron con el cuerpo técnico de Venezuela y se interesaron en mí”, soltó nuestra entrevistada. Llegó al conjunto femenil de Villa Elisa en el 2019.

“Como todos sabemos, no hay ningún secreto con la situación económica que se vive acá en Venezuela. Y la situación a nivel país que todos los ciudadanos están lidiando”, comentó.

También agregó que “el fútbol femenino acá en Venezuela también ha crecido mucho gracias al buen trabajo que se venía haciendo, juntando con los logros que se dieron a nivel de selecciones juveniles. Pero obviamente se nota mucho los problemas económicos en el país y eso ha evitado que el fútbol femenino siga creciendo a nivel profesional”, explicó.

Por otra parte, Marialba Zambrano se definió como una persona independiente, que le gusta vivir sus propias experiencias “sin depender de lo que digan los demás”. “La liga colombiana se cancela y se me da la oportunidad de ir a experimentar en el fútbol paraguayo. No lo pensé y fui. Gracias a Dios ya pude aportar mi grano de arena al equipo y logré sentirme a gusto con el fútbol de allí”, le bajó.

Regularidad del fútbol paraguayo y el tereré

Además, Marialba Zambrano he’i que ya tiene un cariño especial con el clásico tereré de nuestro país por las altas temperaturas que se viven casi todos los días. En lo futbolístico, le llamó la atención la regularidad de las competencias.

“Desde que yo llegué me di cuenta que se manejaban durante todo el año (Apertura y Clausura). Cosa que por lo menos en Colombia o Venezuela no se vive de la misma manera. A pesar de que haya una liga profesional o amateur, tienen continuidad durante todo el año, desde marzo hasta diciembre. Eso es algo muy positivo que creo que no tiene ningún otro país”, sostuvo la mediocampista solense.

De niña, se escapaba de su casa para ir a chutar con los nenes

Consultada sobre alguna locura que le tocó hacer dentro o fuera de las canchas, “Mari” dijo que no tuvo ninguna en especial ya que siempre contó con el apoyo de sus padres. Aunque recordó su infancia en donde se escapaba de mami para ir a jugar fútbol con sus amigos. Volvía a casa a las nueve de la noche voi.

“El apoyo de mis padres es lo que me sirve de incentivo y motivación para seguir trabajando cada día. Quizá no fue una decisión que yo tomé por no querer estudiar (jugar al fútbol). Era la única salida que tenía para apoyar económicamente a mi familia”, reveló.

La pandemia frenó el “sueño europeo”, pero…

También consultada sobre sus metas u objetivos a futuro, la pelotera dijo que “como todos tengo metas a corto y a largo plazo. Pero sí me gustaría vivir la experiencia de jugar en el fútbol europeo. Ya me lo había planteado eso mucho antes, pero por el tema de la pandemia es como que me tocó comenzar de cero”, tiró. Además, Zambrano dijo que no tiene un club en específico en el Viejo Continente. En cuanto a los goles, dijo que “no hay nada mejor que la sensación de marcar un gol”, y que se queda con los tantos que logró con su seleccionado, lo cual sirvió de “incentivo” para darle una alegría a la gente de su país durante los momentos más críticos.