El Cruzeiro rapai, donde chuta nuestro compatriota Raúl Cáceres, vive un verdadero calvario a nivel económico. Con decir que está peor que Olimpia, ya es mucho. Y el que tendrá que afrontar todo el descalabro financiero es Ronaldo Nazario, que ahora es el accionista mayoritario del club.

El propio Ronaldo había declarado que el club está en terapia intensiva. La deuda llega a los 180 millones de dólares, pero ayer, apareció un “acreedor” impensado, que también reclama una suma millonaria. Pero no se trata de un pelotero, sino de un exnutricionista del club, de nombre Guilherme Gomes, que reclama 1,2 millones de reales, cerca de 217 mil dólares por incumplimientos de contrato de parte de su empleador, en este caso, la institución.

Reclama que le abonen avei horas extras, vacaciones, varios sueldos y triple pago los domingos. La defensa del nutricionista pide, también, que le reconozcan indemnizaciones de 2017 y 2018.

Gomes trabajo en Cruzeiro entre 2015 y 2020 y ahora se presentó ante la justicia, una vez que entró en funciones como SAF, para reclamar lo que le corresponde.

¿Qué es el SAF?

La Ley 14.193/2021, que crea la Sociedad Anónima de Fútbol (SAF), es un mecanismo que facilita la transformación de los clubes de fútbol en empresas y aporta una serie de beneficios, entre ellos la entrada de nuevos inversores.

Con esta nueva ley de SAF, las instituciones están obligadas a destinar el 20% de sus ingresos brutos al pago de deudas y el 50% de sus ganancias totales por cada balance.