Pese a que en Europa los horarios se respetan sin chistar, la final de la Liga de Campeones entre Liverpool y Real Madrid, que debía arrancar a las 15:00, se retrasó 36 minutos, por lo que recién iniciará las 15:36.

El motivo del retraso se debe a «cuestiones de seguridad», según informaron responsables de la organización. Al parecer, muchos aficionados, sobretodo del Liverpool, tenían entradas falsificadas en su poder, lo que generó un inconveniente en el ingreso al estadio Stade de france (Paris – Saint-Denis), sede del encuentro.

A raiz de esto, los jugadores de ambos equipos, tuvieron que volver al campo de juego a realizar por segunda vez los trabajos precompetitivos (calentamiento), así como también los actos artísticos previos al encuentro, que recién arrancaron a las 15:25.