Un hombre de unos 45 años llegó hasta aun hogar en el cual se encontraban unas personas dándole al trago luego de haber compartido una cena. Una vez en el lugar, preguntó por uno de los presentes, un chico de 20 años. Cuando lo vio, le dijo para ir a “charlar” afuera.

Hasta ahí, todo bien. Solo que el recién llegado no es que tenía muchas ganas de gastar saliva e hizo que su arma de fuego sea la que hable por él. En seco le pegó unos tiros para luego mandarse a mudar del lugar.

Las otras personas que estaban en el lugar al toque le dieron aviso a la Policía. Incluso pudieron dar nombre del victimario porque era conocido. Si bien es cierto no se sabe bien cuál es el trasfondo, la hipótesis que se maneja dentro de la investigación es que el robo de ganado estaría de por medio.

Aparentemente el finado fue despedido del lugar en el que trabajaba luego que unas vaquitas desaparecieran del lugar. A partir de ahí se instaló un ambiente tenso que terminó con el homicidio.

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