Todos los atletas, sin excepción, han confesado que el honor más grande que puede tener un deportista es representar a su país.

Y basta con mirar las imágenes a la hora de la premiación en los Juegos Olímpicos, cuando suena el himno y se le coloca la medalla al cuello al ganador, las lágrimas brotan como semilla sembrada en el mejor campo.

Esta noche los encargados de la ceremonia inaugural de los XII Juegos Suramericanos Asunción 2022 le rindieron un enorme y merecido homenaje al mejor tenista que tuvo el Paraguay a lo largo de su historia, el genial Víctor Manuel Pecci.

Él fue el encargado de encender el pebetero ubicado en la parte alta de la zona de plateas del estadio Defensores del Chaco. No existe honor más grande que este para un deportista y Víctor lo sabe.

A punto de cumplir 67 años y con alguna dificultad para caminar, el campeonísimo le puso el broche de oro a una noche mágica para él, para los presentes en el Defensores del Chaco y para todo nuestro país.

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