Ya son alrededor de 60 las personas que perdieron a vida en medio de inundaciones apocalípticas que se están dando en la comunidad de Valencia, en España, donde un agua cargada de barro arrasó de manera repentina a varias ciudades no dando tiempo para mucho a quienes de la nada se vieron atraparos en esta oleada.

Cientos de vehículos quedaron varados en las calles y muchos de quienes venían dentro se vieron obligados a subir a los techos de los mismos, mientras estos flotaban, para intentar salvar sus vidas.

El Ministerio de Defensa, que está actuando de lleno en esta verdadera catástrofe natural, he’i que hay mucho temor que, una vez se empiece a retirar el barro que anega muchas poblaciones valencianas, se encuentren más cadáveres y se eleve la cifra de fallecidos.

Este devastador fenómeno se produce por culpa de lo que se conoce como DANA, producido por una masa de aire polar en altura (entre 5.000 y 9.000 metros) que se separa del flujo atmosférico y puede generar fuertes tormentas al chocar con el aire más cálido y húmedo.

Esto hizo que el agua caiga como si fuera que una represa se rompió inundando en cuestión de minutos casas, asilos de ancianos, calles, negocios, tirando puentes y tantas otras destrucciones que ponen la piel de gallina.