Cuando la velocidad y la imprudencia se citan, casi nunca lo que viene después es bueno. Por lo general, el asfalto se impregna de muerte y son varias las familias que deben cargar con el luto y el dolor por haber perdido a un ser querido antes de tiempo. Algo de eso es lo que se vio en las últimas horas en nuestro país donde un montón de accidentes muy graves se cobraron una serie de días.
En el más reciente, en la madrugada de este jueves, un automóvil impactó de lleno contra un árbol sobre la Avenida Mariscal López en Asunción. Tras la violenta colisión, el rodado, un Peugeot 208, comenzó a arder en llamas. Quien iba al mando, un hombre de 37 años, salió despedido por el parabrisas (aparentemente no traía el cinturón de seguridad puesto). El golpe que se dio fue letal.
En otro violento encontronazo, ocurrido en Katueté, se registraron tres fallecidos. Estuvieron involucrados una camioneta de la marca Fiat que se “metió” por el costado del lado del acompañante en un auto Toyota Premio, En el primero de los rodados falleció una persona en tanto que en el otro perdieron la vida dos más. Además de los finados, de entre 25 y 40 años, hay otras dos personas que quedaron con serias lesiones.
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