Por Alberto Castro

Desde esta semana parece que el frío vino para quedarse, por eso la gente fue en busca de abrigo casi en forma automática. Los que pueden renovar el look otoño-invierno, claro está.

Un lugar recurrente para equiparse con los abrigos, encontrando por demás precios económicos llevando productos de calidad, es la feria de los bolivianos en el Mercado 4. Famosa ya desde hace varios años por vender abrigos con lana de los parecidos a las ovejas, conocidas como llama y alpaca para aguantarse hasta la peor helada.

“Estamos en la época donde se lleva mucha campera impermeable doble faz, sobre todo, que están entre 80 y 90 mil guaraníes según el diseño”, comenta Nancy a Crónica, desde uno de los locales.

Innumerables son las ofertas si uno va recorriendo los diferentes locales de la calle Ana Díaz. El potencial cliente se encuentra con atractiva ropa para soportar las bajas temperaturas. Y sobre todo a un costo también bajo.

Don Esteban Cuéllar, ya un conocido de la zona, habló del boom de los ponchos de llama. “Ahora se compra mucho el poncho con lana de llama, que cuestan 150 mil guaraníes. Los de alpaca están el doble, a 300 mil”, he’i el vendedor boliviano que hace más de una década reside en Asunción.

En el local “Rosmerry” se surten cada semana de los famosos gorritos -tipo de la zona del Altiplano boliviano-, muy preferidos para cubrir la cabeza del viento y el frío y porque solo cuestan 15 mil guaracas.

LOS PRECIOS

Generalmente no varían los precios entre un comercio y otro, básicamente mantienen un costo similar, a saber: ponchos de llama (150 mil guaracas), poncho de alpaca (300 mil guaraníes), gorrita del altiplano (15 mil) y campera impermeable (desde 50 hasta 80 mil guaraníes, según la calidad).

A MANO

Los ponchos de “lana de llama” son realizados a mano en dos piezas. Cada ponchito es un diseño exclusivo, pues su lana es hilada a mano y la prenda es totalmente tejida a mano, según explicaron. Hechos en Bolivia, son muy valorados como ropa de abrigo por su poder de “calentar el cuerpito”.