Poco después de ser asaltada por un par de motochorros, Olga Beatriz Pereira López pretendió seguir su vida de manera normal, más allá de la rabia y el susto. Es por eso que, ya caída la noche del domingo, llegó hasta la pollería ubicada en pleno centro de Limpio acompañada de su media naranja, Juan Pablo Ferreira, para comprar la cena.

Por esas casualidades de la vida, un rostro le fue familiar a la joven, que al toque y con un leve pellizco a su pierna peluda, informó que acababa de ver al infeliz que le había robado un rato antes. Como todo un caballero y sin medir el riesgo a enfrentarse, Juan Pablo decidió encararle al tipo.

Ahí nomás se acercó a Osvaldo Pereira Duarte –con antecedentes por robo– a quien exigió la entrega del celular de su enamorada. Osvaldo, sin intenciones de arreglar las cosas por las buenas, desenfundó un arma y disparó al pecho de Pablo.

Herido de bala, Pablo no se dio por vencido. Se abalanzó sobre el mondaha, logrando despojarlo de su arma y arrojándola a la calle. Ante esta situación, Osvaldo, desarmado y sin mucho que hacer, decidió huir. Pero al intentar cruzar la ruta 3, “Gral. Aquino”, un feroz camión le “acarició”, tirándolo a un lado de la ruta.

Agentes de la Comisaría 9.ª Central llegaron hasta el lugar donde procedieron a auxiliar a ambos heridos, quienes se encuentran en Emergencias Médicas, el delincuente bajo custodia policial. Del poder del mismo se incautaron 4 celus, uno perteneciente a Olga.

QUE PIDAN AYUDA, HE’I KOMI

El comisario Juan Escurra, jefe de la 9.ª, comentó que si bien Pablo corrió con una tremenda suerte al enfrentarse al victimario, debió pedir auxilio, ya que esto pudo haberle costado la muerte. “Pueden pedir ayuda a los presentes y reducirlo, o mejor llamar a la Policía, que estamos para eso” dijo el capo policial.