Hay un antes y un después en la vida de Lucía Sandoval, muy conocida por resultar absuelta luego de 4 años de haber estado privada de su libertad, sindicada por homicida de su entonces esposo Húber Martínez. De pasar tantos años tras las rejas, pasó a ser una brillante empresaria que hoy les da la oportunidad a otras exrreclusas a reinsertarse laboralmente dentro de su taller y con la ayuda de un proyecto que nació en el Buen Pastor.

A poco más de un año de haber salido en libertad, hoy se desempeña con éxito como diseñadora de modas, ya tiene registrada su marca Lugra S.A., hace 5 meses, y lo registró con una amiga, también expresidiaria con quien montó el negocio, Graciela Villalba. Actualmente tienen muchos pedidos para fin de año, tanto de vestidos de gala, trajes, como también uniforme para empresas, según lo confirmó a nuestro medio.

La sensación del momento es un hermoso vestido de novia que les tomó confeccionar en 3 meses y fue presentado en su desfile de modas la semana pasada. “El vestido está con una mezcla, tiene aopo’i, encaje ju, ñanduti, telas normales como gasa, es un vestido superimportante”, comentó Sandoval. Todavía se encuentra a la venta y su precio es de G. 6.800.000.

Comentó que los precios son muy variados, hay vestidos que cuestan entre G. 800.000 y 1.000.000, y remeras Polo con logo y todo para el trabajo preparan en cantidades a G. 65.000 cada una.

Proyecto reinsertó a unas 20 reclusas

Sandoval comentó que actualmente están trabajando con un proyecto denominado “Kuña Katupyry”. El mismo fue impulsado por la Cruz Roja y Lucía ya formaba parte del mismo cuando estaba recluida en el penal de mujeres. Hoy día Lucía trabaja con la gente que lleva a cabo el proyecto para reinsertar laboralmente a las reclusas que salen en libertad y que no tienen cómo empezar a ganar su platita.

Unas 20 exrreclusas ya están reinsertadas y están haciendo trabajos dentro del taller de Lucía. El proyecto prevé habilitar un taller especialmente para esas chicas y ya está a punto de habilitarse, según comentó la nueva empresaria. Su próxima meta es tener su propia tienda.