Alexis Sebastián Cabello Ojeda (21) es bombero voluntario de la compañía de los azules de Cacapeguá, hace 3 años y medio.
ÉL nació con hidrocefalia y a partir de los 5 años empezó a usar la silla de ruedas porque ya iba a comenzar la escuela.
Ahora trabaja en la Municipalidad de Carapeguá como encargado de Mesa de Entrada; como si todo fuera poco, es estudiante de Enfermería. Tiene un hermano de 14 años y vive en el barrio San Miguel, donde todos lo admiran por ser tan servicial.
Contó que desde que tuvo uso de razón siempre le gustó lo relacionado a los bomberos, participaba en actividades de la institución, pero como espectador. Recordó que en el 2012, en ese entonces el comandante Wálter Cáceres habló con su familia para que siga la academia y cumpla la función de radio operador y encargado de estadísticas. Hace guardia los domingos, de 08:00 hasta las 20:00 horas.
“Para mí siempre fue mi sueño ser bombero y ayudar desinteresadamente a mi comunidad brindando este servicio. Me sentí muy contento, emocionado, porque nunca pensé que me tendrían en cuenta y siempre voy a estar agradecido por esta oportunidad”, dijo.
SUPERACIÓN
No importa la discapacidad cuando la vocación de servicio está por sobre todo.
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