El teléfono sonó en la Comisaría 3.ª Central de Luque. Del otro lado del tubo estaba Cayetana Jara (23), que no precisamente llamaba a denunciar un robo o algún otro hecho delictivo sino que llamó para decir que estaba a ¡punto de dar a luz!

Pidió que por favor una patrullera acuda a su domicilio para que la trasladen hasta el hospital. Sin dudarlo, los oficiales Israel Troche y Gabriel Caballero tomaron un móvil policial y acudieron hasta la casa de la mujer, ubicada sobre la calle Hernandarias, en el asentamiento Virgen de Caacupé, de la compañía Maramburé de Luque. Cuando llegaron, la alzaron cuidadosamente al rodado y partieron urgentemente rumbo al Hospital Regional.

La patrullera apenas hizo unas cuadras cuando Cayetana no pudo más. Fue ahí que los dos oficiales –como unos verdaderos héroes– se hicieron cargo del asunto. Llevaron a la joven hasta la carrocería del móvil y dejaron por un lado el papel de policías para “vestirse de parteros” y sacaron a relucir lo que la vida y algunos que otros cursos les habrá enseñado.

“Que no grite en los pujos, que haga fuerza como si estuviera en el baño”… y otras tantas frases más, decían mientras la mujer, un poco asustada, pero se dedicó a lo suyo: parir. Finalmente el “parto improvisado” fue todo un éxito y el nuevo ser de esta tierra llegó sano y salvo. “Misión cumplida”, se dijeron los oficiales mientras se miraban uno al otro.

“El policía debe estar preparado para esto y todo lo que sea servir a las personas. Como en este caso, ayudar en un parto”, dijo el comisario de la Comisaría 3.ª Central, Optaciano Cardozo.

Está sanito

Según el informe policial de la Comisaría 3.ª de Luque, la mujer recibió los primeros auxilios por parte de los intervinientes que luego la trasladaron rápidamente hasta el Hospital Regional de dicha ciudad. Una vez en el nosocomio fue atendida por la médica de turno, Nilse Galeano, que procedió al corte del cordón umbilical. La profesional de blanco informó luego que el niño se encuentra en buen estado de salud.