• José María Ortigoza sueña con ser doctor para ayudar a salvar vidas, así como hicieron con él

Como todos los días, José María Ortigoza despertó ayer con una sonrisa, pero en esta ocasión su entusiasmo tenía un motivo especial, era su cumpleaños. Cumplió 20 años de lucha, perseverancia y por sobre todo demostrando a propios y extraños que “sí se puede”.

“Muchos me daban 5 a 7 años de vida nomás, según me contaron mis padres, pero aquí estoy cumpliendo 20 años y llegaré a mucho más. No tengo la menor duda”, comenzó diciendo José, el único caso de siamés que sobrevive actualmente en nuestro país.

Su nacimiento y el de su hermana se produjo en un centro privado de Fernando de la Mora el 7 de junio de 1996. Días después fueron trasladados al Hospital Nacional de Itauguá, donde se realizó la cirugía de separación y pocos días después falleció su hermanita María José, debido a complicaciones cardíacas.

“Ella es mi ángel. Dios quiso un ángel y por eso llevó a mi hermanita. Siempre sueño con María José, a veces hasta juego con ella”, dijo José desde su casa, ubicada en el barrio Santa Lucía, de Lambaré, donde sus padres, Ramón y Cynthia, y sus dos hermanos estaban con todos los detalles para el festejo de cumple.

“Me decían que yo no iba a vivir por muchos años. Pero yo con fe, esperanza y con algunos que otros cuidados en la alimentación y en lo físico estoy muy bien. Lógicamente, sigo con mis controles y algunos remedios, pero me siento demasiado bien. Me dicen que soy un milagro de la vida”, comentó.

El sueño por cumplir…

José comentó que actualmente estudia música en un conservatorio privado y es un capo con la guitarra. “Estudio guitarra clásica, estoy en el segundo año. Además le ayudo a mi papá en su carpintería en todo lo que esté a mi alcance”, dijo.

Pero el joven luchador de la vida comentó que tiene un sueño que anhela con todo el corazón: ser doctor en medicina.

“Hace poco tuve una recaída y los doctores no me dejaban estudiar, pero ahora me dieron de alta para el estudio. Sueño con ser doctor en medicina y ayudar a muchas personas, así como a mí me ayudaron en su momento”, dijo.

“No me canso de agradecer a Dios, a mis padres y a los doctores que me atendieron en todo este tiempo”, finalizó.

“Cuida a José María desde arriba”

Por su parte su madre Cynthia Ruiz Díaz de Ortigoza contó que “Diosito necesitaba un ángel y se llevó a María José para cuidarte toda la vida. Y es ella la que cuida desde arriba a José, quien es el reloj de mi corazón” dijo y agregó que “lastimosamente ahora no estamos en condiciones de pagar sus estudios de Medicina porque estamos un poco apretados (económicamente), pero lucharemos para que pueda cumplir ese sueño”.

El sueño de José María es que alguna universidad le pueda ayudar con alguna beca.

Casos

El caso de siameses se da en 1 de cada 200.000 embarazos. El 50 % corresponde a casos de sexo femenino, según los doctores.