POLONIA. El papa Francisco tuvo una caída durante la misa en Czestokowa, Polonia, donde se encuentra encabezando la Jornada Mundial de la Juventud, con jóvenes de todo el mundo. Cuando comenzaba la ceremonia, tropezó y cayó al suelo pero rápidamente lograron agarrarlo para evitar que se lastimara. Personas cercanas confirmaron que el Sumo Pontífice no sufrió lesiones y pudo continuar la misa con absoluta normalidad.

Francisco encabezó la ceremonia de ayer jueves en el santuario de la Virgen de Jasna Gora, en Czestochowa, Polonia, ante 300.000 personas. El Pontífice argentino celebró una misa en este santuario de la llamada Virgen Negra, la más venerada por los católicos polacos y por Juan Pablo II, en la que se recordaron los 1.050 años de la conversión al Cristianismo de la nación polaca.

Antes de la celebración, Francisco visitó el santuario y se recogió en oración durante algunos minutos ante el icono bizantino que representa a la Virgen Negra.

Durante la misa, el papa Francisco denunció en Polonia “la tentación del hombre por la búsqueda del poder”. Aseguró que la atracción por ganar visibilidad “se infiltra por todas partes”.

Llegó en tranvía

Luego de haber presidido una misa frente a 300 mil personas en el santuario de la ciudad polaca de Czestochowa, el Papa llegó en el tradicional transporte público para presidir el multitudinario encuentro de los jóvenes católicos.

Pese a la seguridad y fiel a su estilo menos pomposo, Francisco viajó en un tranvía moderno y ecológico conocido como el “Krakowiak”, con los colores del Vaticano, blanco y amarillo, para llegar al parque de Blonia, en el centro de la ciudad polaca de Cracovia, donde se realiza la Jornada Mundial de la Juventud.