Pasaron los escándalos de Let TV -hoy llamado Lobo Station-, las duras acusaciones de los productores Lacasa y las “bombas” del conductor Hugo Barrios, tras su salida del Canal. El propietario del medio, el norteamericano de origen ecuatoriano Carlos Avilés, se mantenía en silencio. Ahora, con Q’TAL rompió el silencio y nos cuenta sus verdades. Además, en esta entrevista lo conocemos un poco más también.

– Usted es ecuatoriano, pero desarrolló su vida en Estados Unidos.

– Vivo en los Estados Unidos desde hace más de 40 años, soy ciudadano americano.

– Es médico, pero su pasión parece que apunta más a la música y al arte.

– Siempre quise ser médico, pero siempre estuvo en mí la pasión de la música, del teatro, la televisión. Cuando tuve la oportunidad económica de hacer un estudio de grabación, lo hice. Creé Lobo Recording Studios en Nueva York, que fue catalogado como el mejor estudio. Son cuatro estudios en un mismo edificio. Tuvimos una relación muy estrecha con Sony. Fuimos considerados el mejor estudio por las revistas Billboard y Rolling Stones. Después vino una pasión que estaba detrás mío que es la televisión. Y lo abrí en Paraguay.

– ¿Cómo llegó a Paraguay?

– Yo vine por un festival de la música hace unos años, que se llama Equinoccio Latinoamérica. Reunimos a todos los países latinoamericanos, a través del talento, y eso me dio la posibilidad de llegar a Paraguay y conocer este país.

– ¿Por qué eligió Paraguay para abrir un Canal?

– Paraguay me recordó mucho a Guayaquil, que era mi ciudad. Además, vi a Paraguay como un país con mucha libertad para poder trabajar, como un país con muchas oportunidades. Aquí vine a instalar el Canal, la radio -Lobo Station- y un estudio de grabación -Lobo Recording-.

PROBLEMAS

– Antes de Lobo Station, el Canal se llamaba Let TV, hubo un escándalo… Lo acusaron de haber sacado a su socio, de sacar gente… 

– Para mí hay un apellido letal aquí. Ese apellido es Lacasa: Alfredo y Virginia, a ella le dicen “Muñeca”. Me robaron, me estafaron.

– Pero Virginia no estuvo en el Canal.

– Antes del Canal tuve problemas con esta señora. Se quedó con equipos míos. Hacía contratos con equipos míos y yo no sabía. Se judicializó. Yo entregué los documentos de pago por esos equipos a la fiscal Carla Rojas, pero ella estuvo apoyando a Virginia en el despacho del juez Hugo Sosa Pasmor. El juez, por suerte, no desestimó la causa y sigue. Esos equipos son míos.

– ¿A qué documentos se refiere?

– El papel que dice que los equipos los compré en Miami. Le entregué las pruebas de que yo los pagué con mi cheque y mis tarjetas de crédito. Ella sigue utilizando campantemente mis equipos.

– ¿Antes de Let TV fue todo eso?

– Sí, antes. Freddy -Alfredo- me ayudó a denunciar a la hermana y me entregó toda la información de lo que era la hermana. Después yo caigo con el hermano también, con Freddy.

– ¿Cómo?

– Iba a hacer un complejo de televisión en Areguá, él iba a ganar la comisión. Me vendieron un terreno que tenía tres dueños. El título original era del primer dueño, era el válido. Y me lo vendieron a mí, fue una estafa de 220.000 dólares

– ¿Cuánto de dinero ya llevás perdido?

– Como dos millones de dólares, con todo lo que ya me robaron. Fueron muchas cosas. Por ejemplo, por una escenografía me cobró 72 millones de guaraníes. Después me entero que no costaba ni 15 millones. Me sobrefacturaron. Del Canal llevó mis cosas. Alfredo me pidió que le preste 70.000.000 de guaraníes para sacar a su hija por un tratamiento estético que se hizo en La Costa. Le presté y nunca me lo pagaron. Esta Romina -la hija- le ayudó a estafarme. Lo peor de todo es que me destruyen a mi familia. Llaman a mis hijos, envían fotos. Como no podían hacerme nada legalmente, llaman a mis hijos a molestar.

– ¿Todo esto está en las causas judiciales?

– Están todos en las causas. Pero yo veo que la Justicia no va a fallar a mi favor.

– ¿Analizó dejar todo y no volver más a Paraguay?

– Sí, pero yo soy un poco cabeza dura. Estoy dando oportunidad de trabajo a 60 jóvenes. Muchos estudiantes de periodismo, jóvenes talentos que buscan oportunidades y no las encuentran… Yo se las estoy dando.

– ¿El Canal va a seguir?

– Hay gente que está esperando que yo cierre, pero no, yo voy a continuar. Tengo varios proyectos.

– ¿Hasta hoy, ¿cuánto lleva gastados o invertidos?

– Trato de olvidarme de los números para que no me duela tanto. Está lo invertido y está lo que me han robado.

– Por otro lado, está el caso del conductor Hugo Barrios, ¿por qué salió él?

– Lo de Hugo Barrios me da mucha pena. Él hizo un comentario ofensivo como hombre hacia mí, una cosa que da vergüenza repetirlo. Estuve una vez en su casa, con su papá, que es un médico igual que yo. Le quiero preguntar a Hugo Barrios qué le hice a él para que me trate así. Le di oportunidad para que haga un programa de entrevista. Él se fue solo, ahora me demanda. Yo le pagué hasta el último peso antes de irse.

– El Canal no es rentable aún, ¿cómo hace para mantenerlo?

– Lo que estoy ganando en Estados Unidos estoy invirtiendo aquí. A mí no me molesta gastar aquí, porque lo que estoy haciendo es invertir. Lo que me molesta es cuando viene gente que quiere estafar.

– ¿Cuáles son los proyectos?

– El 60 por ciento del Canal tiene que ser programa nacional. Eso lo voy a respetar, porque es el contrato que firmé con Tigo Star. Estamos preparando nuevos programas, vamos a traer dos producciones también que vamos a realizar en Estados Unidos. Dentro de poco vamos a tener 10 programas propios. También estoy viendo para hacer ficción. No voy a traer novelas de afuera. Yo veo novelas árabes, coreanas… No estoy muy de acuerdo con eso. La manera de poder fomentar la cultura de Paraguay es dando oportunidad a paraguayos.

PERFIL

Médico cirujano graduado en el New York Medical College USA. Propietario de Servicios Médicos Hispanos en Nueva York. En la misma ciudad, tiene también Lobo Recording Corporation, donde grabaron artistas de la talla de Marc Anthony, Thalía y Jennifer López. Es presidente de la Corporación SC Equinoccio y de Lobo Entertainment Corporation, ambos también con sedes en Nueva York. En Paraguay es dueño de Lobo Station -canal de cable y emisora de radio, 88.5 FM-. También de un estudio de grabación que opera como sede local de Lobo Recording.