• IMPUTACIÓN. El Ministerio Público también metió mano en el asunto y abrió una causa en la cual cayeron, de entrada, cinco personas

CARAPEGUÁ. Un arranque de año más “caliente” de lo normal, y no solo por la temperatura, podría costarle bastante caro a una bailarina que hizo hervir hasta las aguas de un conocido balneario de la zona, como así también a dos locutores y otros prójimos por haber sido parte de una serie de hechos “calenturientus bochornosis”, en los cuales el Ministerio Público ya tomó cartas luego que una partida de celulares actuaran como pyrague en manada.

La bailarina Ruth Pereira es la principal protagonista de un espectáculo que tiene poco de “especta” y mucho de lo otro. El mismo fue presenciado por una partida de peques que con sus papis asistieron a los balnearios “Villa Alejandrina” y “Kurupika’y”.

La escena en la cual esta artista de la gran… siete muestra la forma en que un cuerpo se puede sacudir sin parar por varios minutos hicieron que un montón de gente se escandalice, al punto de denunciar de aquí para allá todo lo que se dejó ver, que en realidad fue literalmente todo.

Como consecuencia de semejante show, que poco o nada tenía para envidiarle a una película triple “x”, el Ministerio Público decidió que también debía meter la mano en el asunto, para hacer que la ley penetre fuertemente en este guyryry.

Es así que el fiscal Rafael Ojeda decidió imputar a la bailarina, a los dos locutores que animaban todo, como a las personas que arrendaron el local.

“Multaza”

Si bien es cierto que la figura de exhibicionismo, reglamentada en el artículo 132 del Código Penal, establece que aquellas personas que incurren en este tipo de actos pueden ir presas hasta por un año, también se pone a disposición del juez el optar por cambiar la cárcel por una multa de aquellas.

Igualmente, el fiscal remarcó que la presencia de menores en el lugar complica más la sitú de la bailarina, como así también de Arnaldo González y Alcides Mendoza (locutores); Ramón Felipe Miranda y Abraham Ruiz Díaz, estos dos últimos arrendatarios del lugar en el cual se armó la partuza aquel 1 de enero.

Todos ellos contarán con medidas alternativas a la prisión, atendiendo a que la expectativa de pena no es taaan grande en comienzo.