• CRECIÓ. Empezó con un evento para 100 personas. Ahora tiene una parrilla feroz para cocinar hasta para 1.500 comensales, he’i

Durante 13 años, Ariel Bernal (41) se dedicó a repartir correspondencias en el Correo Paraguayo.

A la par, siempre buscó hacer un extra: hacía delivery en farmacias, vendía productos de primera necesidad del hogar, y algunas que otras veces lo contrataban para ser el parrillero de algún evento.

Bernal siempre tuvo deseos de progresar, tanto así que un día decidió arriesgarse y lo dejó todo para abrir su empresa de servicio de bufete para eventos, con especialidad en el asado.

Empezó de casualidad, un amigo le pidió el servicio y en su debut ya preparó asado para 100 personas. Hoy día tiene una parrilla especial para hasta 1.500 personas.

“Siempre me gustó hacer asado, me contrataban para ser parrillero en eventos y me gustaba. Un día un amigo me dijo que quería que yo le haga el asado para el quince de su hija. Y ahí mi señora y yo nos pusimos las pilas y nos estrenamos. Salió tan bien toda la comida que ahí decidí montar mi negocio”, contó.

“Con la ganancia de ese primer evento compré otra parrilla, y así con cada evento iba comprando más parrillas hasta que me hice de una enorme. Empecé en el 2010 y mi negocio creció a pasos agigantados. Los que me conocen no entienden hasta ahora cómo tan rápido llegué acá”, dijo Bernal, quien aparte ofrece también servicios de pastas, picadas, entre otros.