¿FANÁTICA? La modelo brasileña Érika Canela, coronada en noviembre pasado como flamante Miss Bumbum Brasil 2016, llevó a cabo una acción particular: se tatuó la cara del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, como “un pedido de amor y solidaridad”.
La poseedora de la mejor cola de rapailandia publicó una imagen en su cuenta personal de Instagram en la que dice ser consciente de que “muchos” la “van a odiar”: “Soy latina, mujer y no conozco los EE. UU., pero creo que los discursos de odio solo traen más odio”, aseguró la infartante morocha quien pidió mayor unidad entre los hombres.
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