• HISTORIA. Pedro González quedó paralítico luego que una camioneta que cruzó luz roja le chocara. “Yo no dejé que mi silla de ruedas se convierta en un obstáculo”, tiró

“Hoy (por ayer) gana Cerro, lleve su “binguito” para que el festejo sea doble y si sos olimpista lomímonte egueraha (igual nomás comprá)”, gritaba Pedro Daniel González (37), quien llevaba puesta la azulgrana que tanto ama, mientras ofrecía sus cartones. Pero, para él, cruzar la calle es un reto diario.

En el 2011 un conductor irresponsable le chocó y le dejó postrado a una silla de ruedas. Desde aquel acontecimiento su vida cambió completamente.

“Era guardia de seguridad. Cuando volvía de mi trabajo en una moto como acompañante de un amigo, una camioneta que cruzó luz roja nos chocó. Mi amigo sufrió golpes y gracias a Dios se recuperó, yo logré caminar, fui al hospital y no me detectaron nada. Luego de dos meses ya no podía caminar y quedé así. Si los doctores pillaban mi lesión a lo mejor no estaría en estas condiciones”, se lamentó el joven.

Comentó que le costó asimilar lo que le sucedió, pero sus ganas de salir adelante fueron más fuertes, pese a que muchos le cerraron puertas en cuanto a lo laboral, Pedro desafió los límites de su cuerpo y hoy en día le convierten en una luz que ayudará a disolver un poco más la oscuridad que cerca a las personas con discapacidad.

“Yo no dejé que mi silla de ruedas se convierta en un obstáculo. La vida no se acaba en una silla de ruedas. Y aquí me ven, ganándome el pan de cada día”, dijo mientras vendía sus cartones por las calles de Villas Cué, en Santísima Trinidad.

“Con lo que gano ayudo a mi familia y me compro para mis pañales que tanto necesito, a veces no me alcanza, pero qué le vamos a hacer”, finalizó.

Capo

La mayoría de la gente de la zona de Viñas Cué conocen a Pedro y compran de él los cartones de bingo.

Nunca supieron quién fue el irresponsable que les chocó

Pedro comentó que el conductor de la camioneta que les chocó huyó y nunca apareció. “Nunca supimos quién fue. Es una lástima que la gente actúe así. Pero bueno, hay que seguir para adelante”, he’i.

Comentó además que le gustaría que la gente no baje los brazos tan fácilmente ante cualquier adversidad. “Le digo a la gente que no se rinda por ningún motivo. Hay que poner a Dios en primer lugar, Él hizo el milagro de que siga con vida después de lo que me pasó. Además, hay que tener voluntad para seguir el camino. Y no sabés cómo brinda satisfacción cuando lográs algo que pensaste que no lo podías hacer”, tiró.

“Todo eso me lleva a seguir retando mis propias capacidades para hacer más cosas que muchos me dicen que no podré hacerlo”, dijo.

Sueño

Pedro sueña con tener algún día una casillita donde puede colocar su puesto de ventas de bingo y otras cosas más. “Es lo que más quiero, pero por ahora la plata no me alcanza”, dijo.

Ayuda

Si querés pasar la mano a Pedro para que pueda lograr su sueño de conseguir para su casillita propia, podés llamar al (0971) 30 23 57 o al )(0971) 24 71 92.