Un feroz bolonqui se armó ayer porque un perrito supuestamente iba a ser cocinado. El jagua en cuestión que se llama “Rubio”, que ndajeko escapó de una olla con agua hirviendo de un restaurante asunceno. Tal fue el sarambi que se armó que en la Municipalidad de Asunción se solicitó que se fiscalicen toditos los restaurantes orientales por culpa de un comentario que se generó en el Facebook.

La señora María Inés Vigo, líder de la organización “Narices Frías”, que rescata y cuida a los perros y gatos abandonados o maltratados, ombombe’u que una colega suya encontró a “Rubio” en la calle, acostado en un charco de agua con quemaduras en los testículos y patas traseras.

“Ella lo agarra y lo lleva a un veterinario para que lo revise. El mismo lo inspeccionó y le dijo que no estaba enfermo. O sea que alguien le había hecho algo”, comentó.

Luego esta mujer le avisa a María Inés y a la par lo publica en el feis. “Entonces, una persona escribe y dice que el perro iba a ser metido en una olla para ser cocinado”, he’i la doña. Supuestamente esta persona explica que el pobre perrito iba a ser menú del día y sospecharon de un local gastronómico de Villa Morra.

El tema luego pasó a la Muni de Asunción, hasta donde fueron los de la ONG para pedir ayuda a concejales. “Nosotros no pedimos intervención, pedimos que se fiscalice”, he’i la doña. Lo que sí, en medio de tremenda jagua salida, “Rubio” se recupera y busca dueño que lo cuide.

Piden vicheo de los locales orientales

El arquitecto y concejal de la Muni de Asunción, Federico Franco Troche, he’i que solicitaron que sean fiscalizados toditos los locales gastronómicos orientales en la ciudad, tras la denuncia de “Narices Frías”.

Omombe’u que en Paraguay está prohibido el sacrificio de perros para la elaboración de comestibles. Dijo avei que en nuestro país falta reglamentar una ley contra el maltrato animal para que las personas puedan denunciar estos casos.

“Estos casos son esporádicos, hay sospechas, pero nunca hay una denuncia concreta”, he’i el arquitecto sobre un supuesto mercado negro de perros y la comercialización en locales gastronómicos grandes del país.

No aclares, que oscurece

El concejal Buye Buorgermini, quien había acompañado la denuncia de la organización y quien dijo que supuestamente el perrito escapó de un local de una conocida firma de comida oriental, sacó ayer por la tarde un comunicado de “aclaración”.

El tema se puso fuerte, muchos ya les tildaron a todos los orientales como “come perros”, con un desmesurado ataque de tinte xenofóbico que molestó a muchos.

Buorgermini katu sacó un comunicado donde he’i que ellos solo acompañaron a los denunciantes y que no quieren fomentar la xenofobia, pero sí fiscalizarán los locales orientales para evitar cualquier duda ndaje.

Empresa he’i que nada que ver y Yolanda laló

El local Shangri-la, que en un momento dado fue apuntado, lamentó que la gente ya le meta al rollo de los orientales como “come perros”. Dijeron que para nada sirven carne de jagua.

“En ningún momento hicimos eso ni tampoco vamos a hacer cosas semejantes, porque repudiamos este tipo de actos, en ningún momento hemos ofrecido algún producto contra costumbres locales”, le bajó su dueño Beny Lee.

Por su parte, Yolanda Park, periodista de ascendencia oriental, tuiteó que “de todo ya me tocó explicar en esta vida… Y a mis 37 tengo que, tipo espacio reservado, aclarar que no me como perros?”. La comunicadora oñemongeta con María Inés en la 970 AM y le dijo que los locales orientales no tienen por qué demostrar nada si son inocentes.