Miles de familias quedaron aisladas en distintas regiones del país a raíz de las inundaciones que provocaron las fuertes lluvias que cayeron entre el lunes y ayer. Y para colmo de males, las tormentas continuarán en estos días.

Las zonas más afectadas fueron los departamentos de Ñeembucú, Misiones y San Pedro. “Más de 20 mil familias están con pérdidas materiales. El 40% de Pilar está bajo agua”, dijo muy angustiado Carlos Silva, gobernador de Ñeembucú, donde ya se declaró emergencia departamental. En esta parte del país, la Coordinación de Supervisiones decidió suspender las clases en todas las instituciones educativas del departamento.

Por su parte, en Yabebyry, departamento de Misiones, hendy hína el tema, con más de 800 familias que fueron afectadas por las inundaciones. Incluso la parroquia y el local del municipio ya fueron alcanzados por el agua. Avei los principales caminos de acceso parecen arroyos y permanecen clausurados.

Además, en la ciudad de Villa Florida más de 130 familias, la mayoría oleros, no pueden producir a causa de las constantes lluvias. La cantera de donde extraen la materia prima, el adobe para hacer los ladrillos, está inundada por el desborde del río Tebicuary, comentó Michel Flores, intendente de la comunidad.