• MUCHA FE. Los padres de la pequeña que recibió un corazón nuevo dicen que es difícil describir la emoción y piden a todos orar por la ella

SAN LORENZO. Con la voz quebrada pero llena de emoción Virginia Aguilar, mamá de Jennifer León, la pequeña que durante 8 meses esperó por un nuevo corazón y que ahora recibió uno nuevo, contó que su niña se encuentra estable y que a pesar de que no puede hablar todavía ya pudo abrir los ojos ayer y apretaba las manos y los brazos de sus padres como una hermosa señal de vida.

“Ya le siento más tranquila, ya está despierta, está consciente. Esto fue un regalo de cumpleaños para mí, mi cumpleaños que fue el domingo pasado”, contó Virginia. La joven madre agradeció el gesto de la familia de la donante y dijo que esto solo se pudo gracias a las oraciones que ella y muchas personas hicieron.

“La oración es la base principal para todo. Estoy agradecida con Dios y a esas personas que le dieron el corazón” he’i la doña. Resaltó la señora que cuando contó a su pequeña que apareció el tan esperado corazón, Jenni –emocionada por el hecho– empezó a llorar de la alegría. “Cuando supimos de la donante yo le dije que llegó un ángel que le iba a dar un corazón y ella de la emoción y el miedo de paso empezó a llorar”, terminó diciendo la madre, dejando salir a un lado una leve sonrisa de alegría y esperanza.

Ahora, Jenni deberá pasar un mínimo de tres semanas bajo observación en terapia, como parte del proceso de aceptación de su cuerpo al nuevo corazón.

Liz

Marcos Melgarejo, jefe de Cirugía cardiovascular del hospital de niños Acosta Ñu, contó que la pequeña Jenni se encuentra estable y que actualmente no está utilizando respirador, se encuentra lúcida. El médico recordó el primer trasplante que se realizó en el nosocomio con la pequeña Liz, que actualmente lleva una vida normal, pero con tratamientos.

“Liz es el primer trasplante cardiaco realizado en el hospital, ya van a ser 5 años en agosto. Ella es nuestra paciente estrella”, dijo el jefe de Cirugía, resaltando que aún hay 5 pequeños en la lista a la espera de un nuevo corazón.