• APLAUSOS. Una kuñataî se puso las pilas y decidió luchar contra el hambre que afecta a las personas de escasos recursos

Cinco hogares-albergues, con un promedio de 50 beneficiarios, reciben un plato de comida para cada persona gracias a la loable iniciativa de Ximena Mendoza: “Mboja’o”.

Se trata de una empresa social que se dedica a recolectar los alimentos que sobran en los restaurantes y hoteles.

“Mboja’o” significa partir, dividir, en guaraní. “Cuando uno comparte todo se multiplica”, he’i Ximena, que a sus 25 años tomó el desafío de emprender su empresa social que busca tener un impacto en el ámbito social, ambiental y económico.

La iniciativa, mediante convenios, recoge los platos no servidos o los ingredientes que no se utilizaron en el día en las cocinas de los restaurantes y hoteles, para envasarlos higiénicamente y donarlos a los hogares donde acuden personas de escasos recursos a buscar un poco de alimento.

En el evento “La Comilona” de Teletón, “Mboja’o” logró juntar 176 kilogramos de alimentos que quedaron en el feroz evento.

“La comida se llevó directamente a dos hogares de Sajonia donde sirven almuerzos”, omombe’u la joven empresaria.

Ximena relata que tras cerrar los acuerdos con los locales gastronómicos, la empresa lo único que le cobra es un monto determinado por retirar los alimentos.

“Dentro de poco el centro de acopio será “O’hara”, el centro gastronómico, donde una tecnóloga verificará la calidad de los alimentos y de ahí los llevaremos a los hogares”, he’i.

Una idea que se viene forjando desde que ella era muy pequeña

Ximena cuenta que siempre tuvo interés por la problemática del hambre en Paraguay. “Cuando era chiquitita siempre me llamó la atención que yo almorzaba en casa y al salir a la calle siempre había algún niño pidiendo algo para comer, como que algo no me cerraba”, omombe’u. Ximena, que es licenciada en Comunicación por la UCA y realizó un masterado en Innovación y Emprendedurismo en Barcelona, España. “En mi máster desarrollé esta idea y la vengo a aplicar ahora”, he’i.

No son las sobras sino los platos que no se sirvieron

Ximena explicó que “Mboja’o” no trabaja con las sobras de los platos sino con los preparados que no se sirvieron y con los ingredientes que no se utilizan en la cocina.

“Imaginate que en nuestra casa una zanahoria rayada que sobre puede ser poco, pero en un restaurante lo que sobra es mucho, de eso se puede hacer sopa o jugo”, he’i.

También dijo que se siente emocionada por el impacto que tiene la iniciativa. “Saliendo a la calle te das cuenta que el que tiene hambre no desperdicia nada de comida”, he’i. Ella está segura que “la realidad es transformable”.

50 BENEFICIADOS

En cinco comedores. Es esa la cantidad, en promedio, de personas a las que les está llegando la comida gracias a “Mboja’o”.