POR OSCAR PATIÑO

Libertad llegó al último partido con la mínima ventaja de un punto, jugó un buen partido, golpeó en los momentos claves, se quedó con la victoria y, por consecuencia, con el título.

La diferencia dentro del campo de juego fue muy grande, el equipo de Fernando Jubero salió a ganar, jamás especuló y con toda justicia consiguió su objetivo.

A los 3’ Jesús Medina abrió el marcador y a partir de allí se adueñó del partido.

Tras recibir el gol en contra, el elenco de Campo Grande intentó sacudirse y reaccionar, pero a los 34’ terminó por entregarse, cuando el árbitro Ulises Mereles expulsó a Óscar Velázquez y sancionó penal para los repolleros.

De la ejecución se encargó Santiago Salcedo, quien con mucha categoría definió y marcó el 2-0.

La complementaria fue un simple trámite, el dueño de casa pudo haber marcado por lo menos tres goles más, pero no aprovechó las ocasiones que tuvo. A los 17’ Andrés Duarte también vio la tarjeta roja. Con 9 hombres Independiente prácticamente desapareció del campo de juego.