• FELICES. Luis, preso en el “Hilton”, y Dolores, con prisión domiciliaria, hace 8 años que son novios y siempre quisieron dar ese paso frente a Kirito

Hace ocho años, cuando Dolores López (27) y Luis Olmedo (27) se conocieron, sus corazones estaban vacantes y ambos sintieron que “algo” podría pasar entre ellos. Y Cupido se encargó del resto.

“Clavó” sus flechazos imprevistos y hasta a veces casi inexplicables, pero fulminantes, en los dos. Fue el comienzo de una hermosa relación sentimental.

Pero por esas vueltas que tiene la vida, ambos cayeron detenidos por supuestamente estar involucrados en el conocido caso Curuguaty, de Marina Cué, ocurrido en el año 2012. Hoy, Luis está preso en el penal de Tacumbú y su proceso continúa.

Por su parte, Dolores cuenta con prisión domiciliaria en Curuguaty. Los años pasaron y pese a todo lo que conlleva estar separados y no poder verse, la relación continuó. Pero tenían una asignatura pendiente. Dar el sí ante Kirito. La esperanza de poder concretarlo siempre estuvo en medio de oraciones y pedidos al de arriba.

Y finalmente se dio. Armaron todo como debía de ser y ¡se casaron en la cárcel de Tacumbú! La ceremonia se realizó en la parroquia Virgen de las Mercedes, dentro del penal.

“Era el sueño que siempre teníamos pendiente. Y finalmente se nos pudo dar. Estamos muy felices” contó Dolores, en medio de una emoción mezclada con alegría que no podía ocultar. La pareja tiene un hijo que es su mayor tesoro. “Estamos felices por dar este paso”, dijo y agregó: “Ahora sí somos una familia como debe de ser. Todo salió muy lindo aquí en la cárcel”, dijo.

Visita: una vez al mes, he’i

La parejita tuvo su noche de bodas en Tacumbú Hilton. Ayer, Dolores regresó a su casa en Curuguaty. La doñita comentó que podrá ir a visitar a su ména Luis, una vez al mes, para estar juntitos. “Una vez al mes podré ir a visitarle con una orden judicial, para así compartir y estar juntos” dijo. “Esta es nuestra historia de amor y estamos muy contentos”, agregó. Familiares, amigos y hasta desconocidos participaron de la ceremonia religiosa. “Toda nuestra familia nos acompañó en este paso tan importante que dimos. Bailamos, comimos torta, disfrutamos un montón”, finalizó.