• ENFERMA. Adonival Oropeza contó que todo iba bien hasta que su esposa Mariantjel se enfermó de leucemia

Mientras muchos se quejan de la “inseguridad”, una familia venezolana decidió refugiarse en nuestro país desde diciembre del año pasado, justamente por la seguridad que al decir de ellos hay acá, totalmente diferente a lo que pasa en su país.

Adonival Oropeza (40) y Mariantjel Ortega (35), junto con sus tres hijos decidieron venir a empezar de nuevo aquí, pero la vida les está dando una dura prueba. Mariantjel fue detectada con leucemia hace un mes y los gastos que tienen son desmedidos, por eso están pidiendo ayuda.

“Yo vine primero en setiembre del año pasado porque tengo un primo que trabajaba aquí y me habló de las oportunidades que acá hay. También vi que es un país con mucha seguridad y volví a Venezuela, tramité un permiso para poder venir que tarda tres meses y entonces ya vinimos con mi familia en diciembre”, contó Adonival.

Comentó que comparado con lo que pasa en su país, Paraguay prácticamente es un paraíso. “La gente que dice que hay inseguridad acá no sabe de lo que está hablando. En Venezuela la inseguridad es extrema, uno no puede andar con cosas de valor en la calle porque sí o sí te lo quitan, ni en el colectivo”, dijo.

“Si no tienes dinero ni nada de valor, te dan un tiro y te dicen ‘esto es para que la próxima vez salgas con dinero a la calle’. En Paraguay sin embargo yo viajo por trabajo todas las semanas al interior y todos viajamos relajados, la gente saca el celular sin problema. Eso allá no existe”, siguió.

Adonival y su esposa consiguieron trabajo en una transportadora que transporta granos de soja y maíz para un silo que está en Santa Rosa del Aguaray y ellos se encargan de la parte operativa.

Le detectaron leucemia y piden ayuda de la gente

Hace un mes a Mariantjel le detectaron leucemia en un hospital privado. De allí fue trasladada al Hospital de Clínicas, donde le daban el tratamiento. Días después la situación se agravó porque empezó a tener ya complicaciones con el pulmón y necesitaba entrar a terapia. Pero el servicio público no disponía de lugar alguno, por lo que tuvieron que llevarla de nuevo al privado.

“La cuenta va por noventa y siete millones de guaraníes sin meter el día de hoy (por ayer). El Colegio Bautista, donde entran mis hijo, ha sido muy solidario con nosotros. Hicieron eventos y cubrieron parte de la cuenta. Este es un país muy solidario”, siguió.

Igualmente reconoció que trajo ahorros de Venezuela, con lo que pudo cubrir parte también del gasto, pero no le alcanza para todo. Además, no sabe cuánto tiempo más estaría su esposa internada. La gente que quiera ayudar puede comunicarse con Adonival al 0972-158808.

Su hermana avei “corrió” a USA

Los padres y un hermano de Adonival siguen en Venezuela. Pero comentó que tiene una hermana que es licenciada en administración que también tuvo que abandonar su país por la crisis económica, política y social en la que están para ir a trabajar en Estados Unidos.

“Mi hermana es licenciada, graduada y está limpiando pisos en Estados Unidos, por la situación de nuestro país. Hace más de un año que está allá ella”, expresó. En Venezuela, Adonival y su esposa tenían un negocio que quedó a cargo del hermano de él, pero no saben ni siquiera hasta cuándo funcione, por toda la situación que están pasando.

La pareja espera un día volver a su país, cuando la situación mejore. Mientras tanto seguirán haciendo su vida en este “solidario” país, como lo califican con sus tres hijos Diego Andrés (11), Omar Andrés (9) y Gabriela Andrea (8).