El ministro de Defensa, Diógenes Martínez, y el del Interior, Lorenzo Lezcano, llegaron ayer al Congreso para una reunión pautada para las 15:00 con el pleno de Diputados, para tratar el tema de seguridad en el Norte del país y la actuación de la Fuerza de Tarea Conjunta. Sin embargo, tras una espera de media hora, no se reunió el quorum suficiente y la sesión fue levantada nomás.

Y para hacer el tema más paraguayo porte, un rato después de que se retiraron los ministros, ipahápe se logró el quorum. Estando ya el número mínimo, los diputados analizaron si realizarán una nueva convocatoria.

La última convocatoria a responsables de la FTC fue el 28 de abril del 2014, sesión convocada para pedir explicaciones en torno al caso del secuestro de Arlan Fick. En estos momentos existen cinco secuestrados en manos del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), dos de ellos secuestrados casi en la misma semana el mes pasado.

“Vamos a rendir totalmente cuentas ahora”, había dicho en entrevista previa durante la espera el ministro Martínez, agregando que entienden que se presentarían denuncias de presuntas violaciones de derechos humanos por parte de los efectivos de la FTC.

Martínez dijo que desconocen cuántas específicamente son las denuncias, y afirmó que el comandante tiene expresas directivas de que jamás se atrevan a violentar los derechos humanos en sus operaciones. También dijo que rendirán cuentas sobre todos los gastos realizados, algo bastante cuestionado sobre todo por la falta de resultados.

No figura en la lista de participantes en la sesión reservada el comandante de la FTC, Cnel. Héctor Grau. No obstante, Martínez y Lezcano son los máximos responsables del Gobierno luego del comandante en jefe, el presidente de la República, Horacio Cartes.

De hecho existe un “abandono histórico en la zona, lo que facilitó que el EPP pueda diseminar su ideología”, afirmó brevemente el Ministro del Interior antes de abandonar inesperadamente la sede legislativa.