HACE RAAATO. Doña Felipa he’i que se dedica a esto desde hace casi 20 años y que prepara una gran cantidad día a día

LAS “MÁS RICAS”. La gente que ocasionalmente se paseaba por el lugar comentó a este medio que por lejos son las más ricas de Zeballos Cué

ZEBALLOS CUÉ. Una llamada la emocionó profundamente. Y no era para menos. Del otro lado del teléfono estaba nada menos que el presidente de la República, Horacio Cartes. Encima, no es que le llamó para saludarle nomás, le contó que ¡iba a tener casa nueva! Un suspiro de felicidad entremezclado con lágrimas de emoción era el relleno perfecto de ese momento. Un relleno tan bueno con el que ella, doña Felipa, dice ponerle a sus empanadas. Las mismas que prometió le va a regalar al primer mandatario.

“Cuando hablé con él, me emocioné mucho realmente. Y le dije luego… sin ningún problema voy a invitarle mis empanadas al Presi para que pruebe” contaba con una alegría única, dejando sentir esa sensación que experimentó por dentro desde ese día.

EXPERIENCIA

Ña Adi, apodo que fue puesto por su mamá cuando pequeña, ya que quería que se llame “Adelaida”, pero que quedó en Felipa por pedido de su papá, contó que desde hace más de 17 años que vende empanadas en la zona, ya que tuvo que dejar de ser empleada doméstica para estar más pendiente del cuidado de sus pequeñas. 

“Cuando mis hijas empezaron a entrar al colegio por ahí yo empecé a vender para estar más pendientes de ellas. Así saqué y les eduqué a mis dos nenas”, he’i.

Al ver el móvil de Crónica acercarse a la casa de doña Felipa, muchos decían “preguntale por la empanada”. La respuesta no era más que una pregunta, ¿por qué? “Son las más ricas de Zeballos”, dijeron algunos. 

Y no es para menos. Tiene sus secretos. “Todo hago yo, desde la masa hasta el relleno. Vendo de carne y de pollo y sale bien, a la gente le gusta mucho”, decía la doña. Y la gente le había dado la razón.

“Vine hacia la ciudad para darles mejor educación a mis hijas” 

Doña Felipa, quien es oriunda del puerto Vallemí pero hace 26 que vive en Zeballos Cué. Cuando sus hijas empezaban su etapa escolar decidió dejar todo en su localidad y venir hacia Asunción en busca del progreso para sus retoños, algo a lo que ella nunca accedió. 

“Vine hacia la ciudad para darles mejor educación a mis hijas, porque en el interior no es como acá la educación”, he’i. 

Resaltó además que por primera vez durante todo el tiempo que lleva viviendo en la zona que ya no tendrá que lidiar con la inundación, que suele crear un quebranto enorme en todos aquellos que tienen que dejar sus casas bajo agua. 

“Es una bendición para mí tener una casa, es un palacio donde vamos a vivir”, terminó diciendo, mientras veía hacia atrás la casa hecha a base de maderas en la que actualmente reside.

REGALO 

Contó que cuando se le entregue su casa en el barrio San Francisco va a regalarle al presidente de la República, Horacio Cartes, unas ricas empanadas y otra especialidad de la casa: lasagna casera. 

CIFRA

100 EMPANADAS

Al día llega a hacer doña Felipa, cuando el fin de semana toca a su puerta; el resto de los días van de 50 a 60.