• IGUAPO LA TIPO. El suboficial 1.º de Sanidad, Rubén Franco, se está destacando como “partero chae” con la FTC

Por Gustavo Villamayor

gustavo.villamayor@gruponacion.com.py

CONCEPCIÓN. Una muy buena noticia viene desde la localidad de Azotey, una zona bastante golpeada por el EPP. Los profesionales del grupo médico de la Sub Área de Pacificación N.º 1, dependiente de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), ubicada en la localidad de Zanja Morotî, distrito de Azotey, recibieron un pedido de auxilio, ya que un bebé estaba en camino y por lo visto no veía la hora de nacer.

Y no se hizo esperar mucho este nuevo paraguayito, ya que llegó al mundo en pleno traslado en ambulancia. Esto fue posible gracias a la ayuda del suboficial 1.º de Sanidad, Rubén Franco. El móvil de asistencia tuvo que encostarse a un lado del camino, para que el enfermero pueda trabajar con seguridad y no apeligrar tanto a la madre como al niñito.

“El marido de la señora nos llamó para avisarnos que estaba con trabajo de parto, justo cuando yo estaba de guardia. Le llevamos en la ambulancia y cuando estábamos por llegar en el hospital, el mitã’i nació sanito, sin ninguna complicación para él ni para la mamá gracias a Dios ”, dijo a Crónica Rubén Franco, quien también es papá de tres niños, Zacarías (12), Matías (9) y Milagros (7). Este marino, oriundo del populoso barrio de Sajonia, ya suma a su haber 16 bebés traídos al mundo, según relató.

16 PARTOS

Este milico valé ya ayudó a traer al mundo a 16 peques, algo que lo llena de orgullo a él, a su familia y a sus camaradas, que con humor le llaman “partero chae”.

PAPÁ DEL CORAZÓN

El suboficial Franco nos comentó que, paradójicamente, no tuvo el valor para asistir en vivo a los nacimientos de sus 3 hijos. Además es papá de corazón de 2 nenas, Victoria y Valeria.

Su primer trabajo de partero fue en el día de la Virgen Stella Maris

El cuerpo médico asignado en ese rincón de la República se destaca por su gran labor humanitaria, brindando una atención a los pobladores locales, destacándose los nacimientos de bebés, algo que los militares no se esperaban al principio.

“Hace dos años que estamos destacados en el lugar” he’i Franco. Nos comentó que justo el día de la Virgen Stella Maris, la patrona de la Marina paraguaya, tuvo su primer parto. “Ese día estaba de guardia y era día de la Virgen, vino una señora a tener a su bebé, una niña a la que le puso de nombre justamente Stella Maris, como la patrona de la Marina”. Su mejor recompensa es el reconocimiento de sus superiores: “El comandante me felicitó por mi labor de partero”, nos dijo lleno de orgullo.

“Otallapa cherehe mis camaradas”

El marino también nos comentó de algunos casos complicados. “Tuve un caso de mellizos que se complicó un poco porque los bebés venían atravesados, me encomendé a la Virgen para no fracasar y las criaturas nacieron vivas y sanas”.

El sub’o cree que es una gran bendición poder actuar de partero. “Siempre que me quedo de guardia, se vienen los nacimientos y por eso creo que es una gran bendición del Señor poder ayudar”. Sobre su nuevo rol en el cuartel he’i: “Mis camaradas otallapa che rehe, pero kachiãihápe nomás”.