Jagua Renda es el paraíso de 45 canes y de Brenda, la “chanchiperri” adoptada por Vero Busto y Ricardo Martín Almada. Juntos decidieron adoptarle a Brisa, la primogénita, después vino Tormenta, luego Tsunami, le adoptaron a Casper, Arasunu, y sigue la lista, todos tienen nombre. Algunos fueron rescatados, otros casos especiales adoptados y hay dos “accidentes de trabajo”, de los cuales nacieron 7 cachorros de Puppina y Kuarahy… y 4 de Ña Treme con Hércules y Herminio. La vida de la pareja parece caóticamente hermosa, como se dice pero lograron una convivencia más divertida y constructiva entre humanos y animales, son una familia o manada.

Vero (44) contó que antes de pequeña, ella tenía pánico a los perros, jamás tuvieron perros siendo niños. “Adopté a mi primera canina hace 7 años y ella me abrió las puertas a un mundo nuevo.

Vivíamos en Asunción, en un departamento grande, llegamos a tener 17, de ahí nos mudamos a Areguá”, relató.

Como la familia creció, consiguieron habitar en el área silvestre protegida del arroyo Yuquyry, afluente del lago Ypacaraí hace un año.

“La mejor seguridad para cualquier casa que tenga perros es que duerman dentro, al escuchar un mínimo ruidito fuera de lo normal nos alertan”, remarcó el punto porque los perritos y Brenda duermen dentro en su casa, en familia.

Alimentación

Ellos consumen 80 kilos de purina por semana, más polenta o arroz con verduras o carne de vez en cuando. La ayuda siempre viene bien, son perros que tienen atención veterinaria, comida y medicamentos cuando se necesita.