• TERROR. Salió para comprar una bebida y un loco la tomó del cuello en plena calle y dos testigos no hicieron caso

Liz Marín, de 24 años, iba el sábado a las 11:30 de la mañana por la calle cuando fue atacada por un loco que aparentemente intentó abusar de ella. Todo ocurrió sobre la calle Víctor Cáceres, en la zona del Campus de la Universidad Nacional de Asunción (UNA). “Me levanté el sábado a eso de las 11 AM y salí, quería irme a una estación de servicios ahí cerca para comprar una gaseosa. Cuando estaba en la zona de los moteles, veo que detrás mío venía un tipo sospechoso. Tenía un celular en mano y escribía, luego ya estaba a mi lado. Al llegar al motel Cascada se adelanta y para en la esquina, gira y me asusto, ya le doy nomás mi celular, pero me agarra del cuello y me dice que no quiere eso”, relató Liz. El hombre la obligó a caminar unos metros con ella mientras lo agarraba del cuello ante la mirada indiferente de dos guardias del motel indicado.

Liz cuenta que no gritó enseguida por temor a que la mate, pero luego ve que se acerca una pareja de adultos que venían del súper y gritó. El karai soltó su bolsa y fue para auxiliarla y ahí el tipo rajó. “Me dejó marcas en el cuello del forcejeo, me apretó del cuello y me quería llevar a no sé donde”, omombe’u. He’i que si lo ve lo puede reconocer y lamentó que ocurra a plena luz del día a solo cuadras de su casa.

Ya cuando pudo estar más serena, hizo una denuncia pública de lo que le sucedió en su perfil de Facebook, y varias personas comentaron dijeron que fueron víctimas del mismo hecho en la misma zona.

Un policía no le dio pelota a su auxilio

Liz también relató que cuando sufrió el ataque, fue hasta la estación de servicio que tenía como destino, y pidió socorro a un suboficial que montaba guardia en el local. “Me dijo que seguro era un exnovio nomás que por eso nomás actuó así, yo me quedé asustada y tuve miedo para denunciar”, dijo. Recién ayer formuló la denuncia en la Comisaría 1.ª Central donde iniciaron las pesquisas.

Espera poder conseguir videos

La joven formuló la denuncia en la comisaría de San Lorenzo y con los agentes policiales fueron hasta la zona para recabar filmaciones. “Fuimos y los moteles no nos quisieron dar acceso a los videos, ahora voy a esperar una orden judicial para pedir. Los investigadores no descartan ninguna hipótesis”, dijo la joven, que trabaja como moza y acostumbra a salir muy tarde por las noches, por lo que ahora redoblará los cuidados al caminar por la calle.