• SIMONE VILLAR. La escultural rubiaza de HR Models, está a muy poco tiempo de convertirse en una chef profesional e internacional, y tiene un sueño muy especial

¿SE VA RETIRANDO? Simone Villar, una de las mujeres más bellas y deseadas del país, ya trabaja en lo que será su vida después del modelaje. La rubia debilidad se encuentra cursando la carrera para convertirse en nada menos que una chef profesional.

En conversación con Crónica, la cuerona aseguró que ser chef profesional no es su única meta, ya que, para cuando logre ese objetivo, tiene en mente otro sueño que piensa cumplir.

– ¿Hace cuánto que estudiás cocina?

– Hace un año. Me encuentro cursando el segundo y último año de la carrera para ser chef internacional.

– ¿Siempre te gustó la cocina?

– Siempre me gustó la cocina. Desde chiquita intenté defenderme bien en la cocina y hoy, que estoy estudiando, me encanta el hecho de ir aprendiendo cosas nuevas a diario.

– O sea ¿se puede decir que ya ves cerca tu alejamiento del modelaje?

– Algo así…, creo que voy hasta este año o un 1 año más, máximo.

– ¿La carrera de modelo se va haciendo menos redituable?

– El modelaje definitivamente está en decadencia. Ya no existen trabajos como otras colegas y yo teníamos anteriormente. Pero puedo decir que al menos pude llegar a mi momento de oro, donde viajábamos todos los fines de semana, teníamos desfiles, eventos, nos pagaban superbién y hoy ya no se ve eso. Hoy hay demasiadas chicas, de las cuales trabajan solo 3 o 4. Es muy complicado.

– ¿A vos te sigue yendo bien?

– Yo sigo trabajando bien, sigo teniendo el apoyo de importantes marcas que siguen contando con mi imagen y eso es bueno. Aún tengo compromisos, aún amo mi trabajo y lo aprovecho ya que me da el cuero.

– ¿Cómo vez a la Simone ya convertida en chef profesional?

– Me veo en un programa mañanero cocinando para las doñas de todo el país. Ese es el sueño que tengo y voy a tratar de cumplirlo algún día.

– ¿Cuáles son los platos que te gustan preparar?

– Lo mío son las carnes, pollos, enrollados, la comida que le gusta a todos, no soy de preparar comidas raras.

– O sea, ¿vamos a poder contratarte como asadera?

– Por supuesto. Ya me encuentro disponible como asadera (risas).