• DOS AÑOS. Hoy se cumplen dos años del suceso que terminó con la vida de su hija Vivi. “Tengo sentimientos divididos”, dijo don Paredes

Hoy se cumplen justamente dos años del suceso aquel que apagó por completo la vida de la pequeña Vivi, tras un mal procedimiento de la Senad (Secretaría Nacional Antidrogas). Por otro lado, hace dos meses nacían sus hermanitos Antonio y Milagros, con quienes su padre, don Miguel Paredes, festejaba su primer Día del Padre.

“Tengo sentimientos divididos, por un lado estoy celebrando la alegría de tener a mis mellizos y por otro lado recuerdo y lloro a mi hija Vivi. Esta es una fecha muy difícil para mí. Le pido a mi hija que me dé esa fortaleza, porque ya hay dos personitas que dependen totalmente de mí”, relató don Paredes, quien recuerda como si fuera ayer lo ocurrido con su pequeña.

El Día del Padre lo pasaron en familia en la ciudad natal de Miguel que queda en Itacurubí de la Cordillera. “Estamos con toda la familia, estoy disfrutando de mis hijos y después voy a ir al cementerio a visitarle a mi hija. Aunque estoy mejor que antes, todavía es muy duro para mí. Esto es algo de lo que uno nunca se recupera”, siguió.

Don Miguel comentó además que cada minuto con sus pequeñitos le recuerda mucho a su hija Vivi, quien ya tendría que tener ahora 5 años de edad. “Especialmente la nena la que más me recuerda a ella porque cuanto más grande es la que más le parece a Vivi. Mi señora cuando le cambia a veces se pone a llorar y me dice que es como si fuera que le está cambiando a Vivi”, relató.

Para Miguel y su esposa, sus dos pequeños son su esperanza de ahora en más, por quienes siguen día a día, son sus motores para salir adelante. “Cuando me siento muy mal, pienso en mis hijos y son los que me dan arranque para poder continuar”, finalizó.

“No pude cumplirle su sueño”

Don Miguel recordó los momentos únicos que había pasado con su hija con mucho dolor. “Ella me pidió un tiempo antes de lo que pasó una sola cosa por sus cuatro años (faltaba aún para su cumple) y era que yo le lleve a la escuela para jugar y siento la impotencia de que no pude cumplirle su sueño”, dijo quebrado.

“Dicen que para estar tranquilo con uno mismo hay que perdonar, pero yo no puedo perdonar, porque es muy difícil, ellos le truncaron la vida a mi hija, un ser inocente, que no se merecía esto. Tenía mucho por vivir. Que los perdone Dios porque yo no puedo”, dijo.

CÓMO FUE

El 18 de junio del 2016, agentes de la Senad dispararon durante un operativo de allanamiento en Nueva Italia y aparentemente por error la bala impactó directamente en la niña, quien estuvo un tiempo con muerte cerebral y luego ya falleció.