• ¿PUNTO TURÍSTICO? A este paso, ya podría ser promocionada he’i

A esta altura, ya se puede asegurar que es toda una tradición. Así como lo son comer hasta reventar en las fiestas de San Juan, aplicarle un buen sorbo de carrulim en agosto o meterle un platazo de jopara en octubre, en el barrio Santísima Trinidad ya tienen algo parecido, solo que ahí no es exactamente lo que se come lo que “queda a flote”, sino más bien, lo que sale.

Es que sobre la avenida Primer Presidente, con la lluvia que se vino ayer, “revivió” la fuente… Y no es exactamente la “fuente de los deseos”, sino más bien la “fuente de los olores”. Aunque a decir verdad, es el deseo de todos que ya no “explote” más en cada tormenta.

A modo de burla, algunos en las redes sociales hasta pidieron que se declare como un “punto turístico” de la capital, para que después de ir por la calle Palma o visitar el Panteón de los Héroes, se den una vueltita por este verdadero “iceberg” de… ¡caquita!

La cañería que corre por el lugar corresponde a los desechos cloacales del populoso barrio, pero, por la gran cantidad de agua que cayó, se ve rebosado el conducto y sale con una presión de aquellas capaz de mandar a la China a cualquier motoca que pase desapercibido por este “oloroso” lugar.

INSOPORTABLE

Los vecinos aseguraron que el ambiente se pone “denso” por culpa del fuerte olor que desprende el agua que sale de esa cloaca y que se mezcla con los raudales.