- FELICIDAD. Centenares de niños fueron hasta la ex Caballería y se pusieron a disposición
- ACOMPAÑADOS. Todos los chicos fueron en compañía de su papá o mamá quienes se quedaron chochos con sus hijos “militares”
Con los minutos de las 08:00 iba llegando también la ansiedad de los niños y niñas. A cada segundo iba aumentando. Llegó la hora, con los pulmones cargados de aire todos empezaron a entonar el Himno Nacional, mientras los pequeños seguían firmes en sus lugares tomando muy en serio el papel de soldado.
Cada uno en su pelotón, ubicados según la estatura y el sexo, con una seriedad en el rostro, como todo uniformado, la felicidad de ser “soldado por un día” se transmitía en el brillo de los ojos. Cerca de 800 niños y niñas entre 6 y 12 años fueron a ser parte del Ejército paraguayo por un día.
“Esto se volvió a repetir después de muchos años, más ahora que es el mes del Ejército. Es una actividad que fue aprobada por el comandante y así también para que los niños sepan cómo se maneja el Ejército en su día a día”, decía el mayor Diego Torres, encargado de comunicación.
Mientras los niños corrían, atendían las indicaciones y otros subían a los caballos, Luz Rolón, quien llevó a su pequeño a la ex Caballería, contó que cuando le dijo a su hijo que lo llevaría a ser soldado por un día Mauricio casi no durmió de la emoción y con un solo llamado para que se levante estuvo de pie y ansioso por llegar al lugar.
“Desde que era chico le gustó el tema de los militares, siempre le gusto, él ve todo lo relacionado a los militares y sueña con algún día ser militar”, contaba emocionada la mamá.
Resaltó, que si el día de mañana su pequeño le dice que quiere ser uniformado le va apoyar al 100% ya que conoce de su pasión.
Comentarios