• ABSTINENCIA. Muchos diputados no se animaron a “tocar” al colega

En medio de un guyryry de aquellos, donde algunos querían “camuflar” su voto mediante el uso de la electrónica y otros querían que se dé la cara para que la gente sepa quiénes fueron los que le apoyaron, se procedió a “blanquear” al diputado colorado José María Ibáñez, de quien se pedía su chute inmediato de la “Honorable Cámara” por el caso de los “caseros de oro”.

Al final, con 27 votos a favor, 6 en contra, 42 votos en blanco de parlanchines que “ñembotavy”, 5 que ni se fueron luego, quedó denegado el pedido de la pérdida de investidura al parlamentario, por lo que seguirá por el resto del periodo cobrando su platita cada fin de mes.

Como hendy kavaju resa, después de ver que se salvó de ser chutado, y como ni de rebote piensa en renunciar, más allá de haber admitido públicamente que transfugueó con la plata del pueblo, pidió un mes de vacaciones.

Los buenos compañeros que tienen, entendiendo el “difícil momento” que atraviesa, obviamente no le negaron un merecido descanso a un mes de haber entrado en un nuevo periodo parlamentario.

En su defensa, Ibáñez he’i que “yo he sido sancionado por el daño, por el hecho, con 30 millones de guaraníes y una reparación social”. Sostuvo que existen “reglas del debido proceso que deben ser respetadas por todo el sector de la sociedad”.

IKUERÁI ALGUNOS

Un grupo de ciudadanos se manifestó sobre la calle El Paraguayo Independiente y 14 de Mayo, expresando su indignación contra quienes apoyaron la continuidad de Ibáñez.