• BATALLA. Sandra estudió Ciencias de la Comunicación y quiere después ir por Derecho
• LE AYUDAN. Sus propios compañeros le compran sus productos, tanto los de su clase como los de otros cursos. A full tiene pedido

Bien temprano Sandra Rodríguez (20) se levanta a preparar y hornear sus cupcakes (minitortitas) para llevarlos al mediodía consigo en su viaje rumbo a su Facultad. Esta es la manera en que se paga los gastos de estudio. Mientras “quema pestañas”, también vende sus tortitas a los demás estudiantes y salva para su pasaje y demás gastos.

“Empecé con esto hace aproximadamente 7 meses. Siempre me gustó el tema de la repostería y probé un día ayudarle a mi familia con los gastos y me salió. Pero le pedí ayuda a mi primo que estudia para ser chef, él me enseñó”, contó la joven universitaria a nuestro medio.

Sandra está cursando el tercer año de la carrera de Ciencias de la Comunicación y la meta que tiene ahora es terminar las materias y poder pagar también su tesina con la venta de sus productos.

“Yo vivo en Capiatá y de ahí viajó todos los días y en colectivo transporto los cupcakes. Normalmente llevo 24 unidades cada día, pero cuando tengo pedidos de antemano llevo más”, relató a nuestro medio.

La estudiante y emprendedora creó luego una página en Facebook que lleva el nombre “Mr. Dulces”, para promocionar aún más sus productos y le está yendo superbién. “En fechas como el Día de la Amistad por ejemplo vendí muchísimo. Ahí me pedían ya los cupcakes con cajas decoradas”, omombe’u.

Comentó además que sus padres la ayudan muchísimo con la entrega de los productos. “Ellos me re-ayudan y están muy felices conmigo”, siguió.

“Mi papá es abogado y quiero seguir sus pasos después”, he’i

Sandra quiere poder ejercer su profesión tan rápido como termine la carrera. La siguiente meta sería además estudiar Derecho. “Mi papá es abogado y quiero seguir sus pasos, pero sería más para complementar con lo que quiero hacer que es el periodismo”, dijo. Comentó que le gustaría ser cronista de la radio o la televisión.

Ella tiene 3 hermanos, dos de ellos ya profesionales y uno aún es menor de edad. Comentó que no es tarea fácil esto de dedicarse a la repostería cuando llegan las épocas del examen. “Suelo madrugar estudiando y adelanto mis lecturas cuando es así”, relató.

3.000 GUARANÍES

Es el precio al que vende las tortitas en la Facultad de forma individual. También los vende por pack.