• NUEVA VIDA. El jugador del pueblo, Mario Ricardo, nos habla sobre su debut con Sol de América, de su nueva vida, las exigencias, la alimentación, el adiós a los “asaditos”, las chicas y mucho más

Quizá era el momento esperado por gran parte del público. Fue el debut de Mario Ricardo, el pelotero que se ganó el corazón de todos. Apenas entró a la cancha a jugar su primer partido de Primera División, fue TT en Twitter, y todos hablaron de él.

–Se dio tu debut, en el empate contra Nacional, ¿podés contarnos cómo fue ese momento?

–Cuando me llamó el profe (Almeida) no podía creer, fue una sensación única. Lo primero que me pasó por la cabeza fue Dios, Él hizo que esto sea posible. Pero una vez que (el técnico) me dio las indicaciones ya me concentré en el partido. No podía permitirme ninguna distracción, tenía que estar seguro.

–¿Qué cosas te pasaron por la cabeza?

–Como te dije, desde que entré estuve muy metido en el partido. Por ahí, estando ya en casa, pensando, me vinieron muchas cosas, recordé todo lo que soñaba… Tuve esa sensación de “¡Mirá dónde estoy!”. Y estoy muy agradecido realmente con Dios, con la familia y con toda la gente que me apoyó.

–Te convertiste en un tipo muy querido, ¿leés todos los comentarios, toda la buena onda que te tira la gente?

–Realmente es emocionante, espectacular es sentir apoyo de la gente. Todo eso me sirve como combustible para tratar de trabajar más duro día a día para no defraudar a los que confían en mí.

–¿Quiénes se fueron a verte ese día?

–Mi familia, mis papás y eso, se estaban preparando para ir, pero por el tiempo inestable de ese día no se dio. Sí se fue el presi (de Cristóbal Colón). Estuvo con su novia apoyándome. Estoy agradecido con él, una vez más me demostró su apoyo.

TODO NUEVO

–¿Qué cosas diferentes encontraste en Primera División comparando con lo que hacías en Cristóbal Colón?

–Realmente, mucho. Ya en lo físico es totalmente diferente la exigencia en Primera División. En lo futbolístico también. En el ascenso se juega con más choques; cuando recibía la pelota me llegaban tres o cuatro y tenía que bancarme para salir o hacer un pase. En Primera hay más espacio, la pelota se entrega con más facilidad porque la cancha es linda y porque los compañeros se te muestran rápido. Se te hace más fácil, más cómodo realmente. Después de un mes y medio, tuve mis primeros 25 minutos en un partido. Creo que no desentoné.

–¿Qué te dijo tu técnico después de tu debut?

–Realmente, el profe es de hablar poco, pero sí me felicitó, Iván (Almeida) y Carlos Giani (directivo) también. En verdad todos mis compañeros también.

–¿Cambió tu ritmo de vida?

–Totalmente. Hendy kavaju resa, realmente. La exigencia física es mucha. Cuando termina la práctica, llego a casa y lo único que quiero es ver mi cama.

–¿Tu alimentación cambió?

–Sí, cambié los asaditos por yogur con cereales. En Colón, después de las prácticas, le metíamos asadito de la esquina con los compañeros, ahora ya no se puede. Después de una práctica tengo que meterle algo más livianito.

–¿Entonces te despedís también de las hamburguesas?

–Ya no hay lugar para las hamburguesas, ahora como frutas. Uno le mete un sacrificio enorme para estar en forma y no desentonar.

–¿Bajaste de peso?

–Sí, ahora tengo 4 kilos menos. Pesaba 98 kilos, ahora tengo 94.

–¿Cuánto medís de alto?

–De estatura tengo 1,89 m.

EL PRIMER SUELDO

“Ya está todo colocado”

–¿Ya cobraste tu primer sueldo?

–Mi primer sueldo completo ahora recién voy a cobrar, porque lo que ya cobré fue por cuatro días nomás.

–¿Ya tenés pensado en qué vas a gastar?

–Y ya está todo colocado, tengo que pagar mis cuentas jajaja…

–Habías dicho que en el Cristóbal Colón jugabas por premio, ahora ya tenés sueldo y eso seguro te da tranquilidad en lo económico.

–Sí, yo y mi hermano dependíamos de que nos vaya bien en el resultado de cada partido. Si no ganábamos y ya no alcanzaba la plata, le pecheábamos al presi.

–¿Te vas a mudar o seguís en tu misma casa?

–Por el momento sigo en casa, por ahí voy a calcular para ver si me mudo más cerca del club. Con el profe Almeida trabajamos doble turno y me cuesta el traslado. Pierdo 4 horas entre ir y volver.

–¿Estás en pareja, tenés novia…?

–Estoy con mis padres, soltero. Nada, nada…

–Seguro que después de tu aparición en televisión, en diarios, en redes sociales muchas chicas no quieren que sigas solo.

–Siempre hay…, pero estoy bien así, tranquilo. Ahora me concentro más en el fútbol. El trabajo es pesado, el compromiso es grande, no puedo distraerme en este momento.

LOS COMPAÑEROS

“Me adapté muy rápido”

–¿Cómo te recibieron tus compañeros cuando llegaste recién al club?

–Realmente muy bien. Me adapté muy rápido con ellos. Todos hicieron que no me sienta como un extraño en el grupo.

–¿Quiénes son los más kachiãi?

–Realmente, este grupo es espectacular. Por ahí, los más kachiãi son el “Pinti” (Álvarez), Aldo (Vera), Gerardo (Ortiz).

NADA DE FARRAS

Mario aclara que no es una persona farrista, recuerda que en Año Nuevo quizá era el único momento en que disfrutaba de fiestas en el club. “Pero eso no voy a extrañar, porque como te dije, no soy luego de farrear, me gusta más quedarme en casa a ver películas”, dijo el pelotero a quien le gusta las de acción. “Después me paso por esos canales que muestran fútbol”, he’i.