• POR JORGE IZQUIERDO

Llegar a cumplir un objetivo en la vida siempre tiene su cuota de sacrificio, dedicación y un montón de cosas más, pero llegar a tener tres profesiones implica una enorme fuerza de voluntad.

Uno que supo capear un montón de adversidades es Julián Ángel Aquino (38 años), conocido como “Pantera 40”. Nuestro entrevistado de hoy es policía, es árbitro y además es licenciado en Educación Física.

Julián estuvo pitando el domingo pasado la final en la Liga Luqueña, porque es árbitro UFI (Unión del Fútbol del Interior) y sobre sus funciones como árbitro, Ángel comentó a Crónica que “me recibí hace dos años y desde el año pasado vengo arbitrando.

Ya recorrí varias ciudades de nuestro país, ya tengo varios partidos encima. Soy policía hace 16 años, estuve en la FOPE, fui casco azul, tuve muchos enfrentamientos con barras bravas y acá estoy, tratando de superarme día a día.

Mucha gente me putea en las canchas, pero ya me acostumbré, es normal eso, más aún en las ligas del interior. Trato de imponer justicia y no perjudicar a ningún equipo.

Si hay algo que siempre sostengo es que soy policía y árbitro con honestidad. Mi familia siempre me apoyó y gracias a eso también puedo hacer lo que me gusta”.

Le consultamos si alguna vez fue tanteado con alguna coima en algún partido y atendé lo que dijo: “Hasta hoy en día no me ofrecieron nada, creo que no les doy la chance. Siempre antes de los partidos me reúno con integrantes de los dos equipos y les digo que hagan nomás su trabajo, que jueguen al fútbol y que nosotros haremos nuestro trabajo. Nunca me quise meter en esas cosas (coima), a los dirigentes les hablo también en la previa a los partidos”, agregó.

Entrando más en confianza, “Pantera 40” nos contó lo que hacía de adolescente para ganarse algo de plata: “Cuando tenía 10 años ya me iba con mi papá a ayudar en albañilería, luego trabajé en una panadería y también hacía de herrero. Sé lo que es el sacrificio, por eso valoro lo que Dios me ha dado”, remató.

Julián también tiene a dos referentes en el arbitraje

Julián Aquino estuvo también en el Norte con las fuerzas especiales en la lucha contra el EPP, luego se vino de vuelta y empezó de lleno con el arbitraje.

En medio de su buena onda, el polifuncional hombre señaló que “siempre me gustó esto y gracias a Dios pude conseguir recibirme y tener la chance de arbitrar. Mis referentes en esto son Éber Aquino y Néstor Pitana (argentino elegido hace poco como el mejor árbitro del mundo).

“Estuvimos este año trabajando en la Copa Paraguay en los clasificatorios por el interior y para el año que viene queremos estar en instancias decisivas. Veremos qué pasa”, finalizó.