Todas las personas nacen luego con algún don muy especial que la vida les regala, solo que algunos lo explotan muy tarde. Pero Thiago Fernández Balbuena, de Ciudad del Este, con apenas 6 añitos ya es un capo total en su profesión. Con una sonrisa de oreja a oreja le recibe siempre en las fiestitas a los niños para hacerlos reír hasta más no poder.

Es todo un payasito de la gran siete y gracias a su papá, más conocido como el payaso Pirulín, Raúl Fernández y su mamá Raquel Balbuena, desde hace 4 años se dedican a divertir a los niñitos como él en los cumples.

“Desde que tenía días de nacido ya le llevábamos a los shows con nosot ros”, omombe’u su mamá. Había sido desde que era bebe’i luego él ya se dio cuenta de lo que quería ser cuando crezca. Según contó Raquel, cuando tenía dos años el mitã’i ya pidió de regalo un traje, para que pueda participar de los shows. Cuando eso era el primer payasito en pañales ra’e.

“Ahora en vez de pedir por su papá, la gente pide por él y entonces todo se queda a su cargo”, he’i avei.

Todos los invitados de la fiestita se quedan encantados con el gran carisma de este payasito, que disfruta mucho de hacer reír a los niñitos.

“Él es un artista nato, tiene un carisma único y una conexión increíble con el público”, aseguró orgullosa su mamá. Thiaguito el payasito va al preescolar en la escuela y todos sus compañeros le aprecian mucho porque es un verdadero “payaso” y le hace reír hasta la profesora, en la clase.

Como su papá quiere ser el valécho payasito

Su papá Raúl Fernández, he’i que está muy orgulloso de lo que es su hijo y de lo que ya logró con su corta edad. “Una vez en la escuela le preguntaron qué quería ser cuando sea grande, y él dijo un gran payaso como mi papá”, contó emocionado anga Pirulín. Según dijeron, él disfruta mucho de lo que hace y lo toma con muchísima responsabilidad ndaje.

En Alto Paraná se volvió re-famoso ya por todos los shows que hace. “Nosotros hacemos giras por todo el interior porque la gente le quiere ver”, he’i feliz su mamá.