Pensando en darle el mejor regalo de cumpleaños al amor de su vida comenzó a imaginar varias ideas, y de repente se le ocurrió una, que le marcó a ella también.

Yamila Osorio (23), una joven enamorada de su novio, pensando en aquel regalo, encontró una técnica llamada hilorama, donde se usan hilo, clavos y un pedazo de madera, que al terminar se convierte en una obra de arte.

Rostros, la imagen de un pesebre, la forma de una guitarra o todo lo que se le pasa por la creatividad son dibujados y luego se les da forma con el hilo, y fue así cómo Arturo López (27) y Yamila, hoy ya como pareja de casados, dieron vida a Inimbo, un arte que se hace con hilo.

“Mi señora quería hacerme un regalo de cumpleaños, ella siempre fue muy creativa. Empezó a investigar y encontró que había una técnica que se llama hilorama y con una foto nuestra donde yo toco la guitarra y ella estaba cantando, cortó, dibujó y probó.

El resultado final fue una locura, es hermoso y hasta ahora tengo ese cuadro”, contó Arturo, quien quedó sorprendido con la gran obra de arte que le había hecho su señora.

La admiración por su trabajo aumentaba cada vez más y las personas que veían el cuadro quedaban fascinadas, hasta que hace más de 3 años de ser un arte solo para su novio, pasó a reproducirse ya en varios cuadros.

“Las fechas donde más nos piden son para Navidad, por el tema de los pesebres, también para el 14 de febrero, para el Día de las Madres.

Hacemos trabajos personalizados, pero siempre lo hacemos con anticipación porque nosotros también tenemos nuestro propio trabajo aparte de Inimbo”, contó Arturo, quien no dejó de resaltar que todo lo aprendido en el rubro del arte le enseñó su esposa.

Siempre supervisando el trabajo que se hace

Arturo trabaja en un colegio católico, mientras que Yamila lo hace en una empresa arquitectónica y está en el último año de Arquitectura.

Asegura que cuando empezó todo el tema, su querida esposa le enseñó los primeros pasos, pero hasta ahora es ella la que se encarga de ver todos los detalles y supervisar que esté todo bien. “Ella siempre supervisaba todo, ya que ella conocía bien la técnica”, dijo Arturo.