Ya forma parte de la cultura de los pilarenses el cuidarse entre sí, la rápida acción les valió limpiar la ciudad de este tipo de hechos delictivos, es como estar viviendo en otro país en donde no te roban en la calle, aseguran.

Dejar las ventanillas del auto abiertas u olvidar las llaves por el vehículo puede considerarse como un error fatal en la mayoría de las ciudades país. Sin embargo, en algunas, estos “descuidos” al parecer no tienen consecuencias tan graves.

Por ejemplo, ndaje es normal recorrer las calles del centro de Pilar, capital del Ñeembucú y encontrar motocicletas estacionadas frente a las casas con las llaves puestas, autos con las ventanillas bajas y sin llavear y nadie roba nada.

También dicen que se puede caminar tranquilamente a la hora que sea y no ser víctima de motochorros. Todo esto, según las estadísticas que maneja la Policía de Ñeembucú, que son impresionantes.

“Aquí en la ciudad se conocen todos y si ocurre algo enseguida se avisan y se ayudan entre todos”, contó el comisario Carlos Aguilera.

Acotó que los últimos hechos de motoasaltantes ocurrieron en el 2014, y los casos de hurto de motocicletas son muy escasos.

“Cuando ven cosas sospechosas nos avisan y de esa manera ya actuamos, además solo la Ruta 4 es la entrada y salida a la ciudad, así que si ocurre algo ya los puestos policiales que se encuentran en el camino arman los bloqueos y por eso es imposible poder huir, ya que existen terrenos privados, grandes extensiones de campo y grandes esterales”, explicó el comisario.

Agregó que los que cometían esos hechos delictivos eran por lo general gente de otra zona he’i.

“Estoy muy seguro de que no me van a robar la moto”

Carlos Vázquez viaja todos los días al centro de la ciudad de Pilar y deja estacionado durante todo el día su moto frente al local en donde trabaja, sea la hora que sea.

“Siempre encuentro mi moto en donde lo dejé, varias veces inclusive con la llave puesta, como en la ciudad nos conocemos todos, es muy difícil que se robe y se venda una moto en la misma zona y si te lo roban no van muy lejos, porque son rápidamente dete nidos”, indicó.

Vazquez agregó que son “bendecidos por Dios” porque pueden salir a caminar a la hora que sea sin miedo.

“Nadie te asalta ni te dispara para robarte tu celular, es más, estoy muy seguro de que no me la van a robar. Si no encontrás tu moto, lo más probable es que un amigo tuyo bromista lo escondió en otro sitio”, señaló.