• Licenciada Rocío Paredes
• Psicóloga Clínica

Hola Rocío, cómo estás, espero que bien, yo no estoy tan bien y te quiero hacer una pregunta. ¿Cuándo se enfría, cuándo se va acabando una relación?, tengo muchas dudas respecto a mi pareja, el romance empezó hace 5 meses, por internet, es una relación a distancia, él está en Argentina, pero viene cada vez que puede a verme.

Al comienzo me mensajeaba todos los días, ahora disminuyó, me escribe esporádicamente, cada dos, tres, ocho días, no encuentro la explicación de qué le puede estar pasando a la otra persona.

Yo digo que tenemos que ponernos de acuerdo, pero él no quiere entender, me pone muchos peros para estar juntos, hay días en que no hablamos y para mí eso no es una relación.

Ahora me dijo que todo queda a mi cargo si seguimos o no, pero me siento atada de manos y pies para tomar esa decisión.

Lo que pasa es que él me está ayudando económicamente, paga mi alquiler y mis gastos para que tenga mi tranquilidad, me pidió que deje mi casa, mi trabajo, mi familia por esta relación, pero él no lo entiende así, me gustaría vivir con él, pero por el momento no se puede porque tiene impedimentos familiares, me dice.

Para mí no es vida, creo que tiene todavía algo con su señora, pero según él están separados hace mucho. Esa situación me pone mal, un amor a distancia no es lo que yo quiero y seguimos, pero a las patadas.

Para mí no es vida así, tener un amor a kilómetros de distancia, me cuesta mucho, me intranquiliza esa desconfianza.

A mí me da la impresión de que no es sincero conmigo, hace 15 días que estuvo aquí, hubo una desconfianza de su parte, me hizo varias preguntas si estoy con otra persona, una escena de celos y sin embargo yo le pregunto por su señora y me desvía el tema.

En otra oportunidad, él me aseguró que hace 4 años ya no conviven ni viven juntos en la misma casa, pero yo escuché cuando hablamos por teléfono, escuché que del otro lado su hija le preguntó por su mamá y él le dijo, ahí está en la vecina y esas cosas me incomodan…

No quiero ser destructora de un hogar, si él no es fiel con su señora yo no quiero ser parte de eso, porque a mí me destruyeron mi hogar así.

Yo no estoy acostumbrada a andar con mentiras y encuentro muchas cosas en él que no tienen coherencia.

Si él me dice quiero salir de una relación, estoy en una relación, yo le voy a comprender, pero me niega cuando le pregunto solo me dice que me voy muy rápido, pero eso a mí me tiene muy incómoda.

Yo no soy una persona que me voy a acostar con uno, y con él porque me está manteniendo, y creo que de a poco se va acabando nuestra relación, porque ya no me llama ni me escribe como antes y yo tampoco quiero ser pesada, no quiero que diga que ya otra vez le estoy llamando.

También le respeto mucho, pero me siento mal no saber nada de él, me cuesta, me acostumbró, antes me llamaba tres veces al día, ahora ya no. No sé qué pensar. SALLY, DE VILLETA, 46 AÑOS.

LA RESPUESTA: RELACIONES VIRTUALES EN AUGE

La rutina de los mensajes pueden disminuir, pero no el sentimiento

De escribirte todos los días a no escribirte nada también tiene que ver con la rutina y las emociones que se van generando a través de la comunicación. Es normal que dismimuya, pero no los sentimientos si se afianzan, si son verdaderos.

Podrían buscar un punto en común para ampliar la dimensión emocional, eso se hace a través de los temas que comparten.

Hoy en día la tecnología permite que las relaciones virtuales sean más estrechas que antes, pero tiene mucho que ver las expectativas que tengas de una vida en pareja, de la satisfacción que te produce y tarde o temprano eso pesará más.

Tienes que sentirte cómoda en la relación y si hay algo que aclarar, buscar la manera de hacerlo sin peleas ni acusaciones irracionales tampoco. Con el tiempo únicamente podrás saber si la relación pasará a un siguiente nivel que sería el de la convivencia, que entiendo es la que te interesa. Anda con calma.

Hablar con claridad y con la verdad es primordial a la hora de comenzar una relación, más aún si se trata de un amor a distancia, hay que reforzar la confianza.

Sin embargo a mucha gente le cuesta, prefiere pintar una “facha” hasta asegurar la conquista. Al comienzo buscan impresionar, o simplemente no tocar ciertos temas que se cree podrían hacer que la persona de su interés los rechace.

Suele pasar que se alimentan las dudas cuando no existe una coherencia entre lo que te promete y sus acciones.

Siempre hay que buscar el equilibrio entre lo que se dice y se hace, como una señal para darte cuenta de sus reales intenciones, pero hasta que no exista un sinceramiento no puedes saber a ciencia cierta y te toca creer ciegamente o empezar a desconfiar.