En la vida existen personas con la suerte de lograr sus metas con facilidad, pero también están las del otro extremo, las que tuvieron que pasar por mucho para cumplir sus objetivos.

Ese es el caso de Solange Encina, uno de los rostros frescos de los canales C9N y SNT. La periodista, quien se inició en su natal Encarnación, recibió hace unos años la propuesta de venirse a la capital por mejores horizontes.

Aceptó, no la pasó muy bien, pero hoy recuerda con orgullo aquella época en que dormía sobre un colchón, en una pieza de 4 x 2 y en vez de ropero, contaba solo con unos pares de ropa para ir a trabajar.

–¿Mostraste en redes cómo fueron tus primeros tiempos en Asunción?

–Sí, la foto, como mencioné, es de agosto del 2015. Yo llegué a Asunción en junio de ese año. La verdad que fueron tiempos muy difíciles, más aún porque estaba sola. Yo no tengo parientes en Asunción, pero luego de esos 6 meses iniciales todo fue mejorando.

–¿Te viniste del interior con la esperanza de triunfar?

–Sí. Yo trabajaba en Sur TV en Encarnación, que forma parte del grupo Albavisión. Me comentaron que había un lugar disponible en Paravisión y me ofrecieron el puesto de cronista. No dudé en aceptar.

–¿Te habían dicho que te vinieras con pocas cosas?

–No me dijeron eso. Yo vine con poco porque al principio no tenía un lugar fijo donde quedarme. Alquilaba temporalmente y no podía andar con muchas cosas de acá para allá.

–¿Y qué trajiste contigo?

–Me vine con solo tres bolsos de ropa y calzados, mi notebook y unos cuantos libros.

–¿Cuánto tiempo te tocó dormir solo encima de un colchón?

–Estuve 2 meses así. Hasta que pude traer mis cosas de Encarnación. Ahorré un tiempito y así traje todas mis cosas.

–¿No llegaste a pensar en regresarte a tu ciudad?

–La verdad que no se me cruzó eso por la cabeza. Estaba muy segura de mi decisión. Soy una persona muy exigente conmigo misma. No me gusta dejarme estar y gracias al apoyo de mi familia y amigos pude lograr mis objetivos.

0–¿No llegaste a pensar en regresarte a tu ciudad?

–La verdad que no se me cruzó eso por la cabeza. Estaba muy segura de mi decisión. Soy una persona muy exigente conmigo misma. No me gusta dejarme estar y gracias al apoyo de mi familia y amigos pude lograr mis objetivos.

–¿Cómo te sentís hoy con tu trabajo?

–Feliz, orgullosa y con ganas de seguir.

–¿Tratás de viajar cada tanto?

–Una vez al mes me escapo un fin de semana para Encarnación, para poder visitar a mi gente.