• Por Jorge Izquierdo
• Periodista

Su sueño de ser un jugador profesional lo llevó hasta Centroamérica, donde en Costa Rica es considerado un verdadero ídolo en el equipo de Municipal Pérez Celedón. Lauro Cazal (33 años) supo pasar todo tipo de dificultades para llegar a ser lo que es hoy en día.

Oriundo de Villarrica, charló con Crónica sobre su estadía en ese país, donde es goleador. “Estoy haciendo bien las cosas. Vengo marcando goles y ayudando a mi equipo. Soy el primer paraguayo que salió campeón acá y me valoran mucho. Eso es algo que me motiva a seguir procurando”, tiró el delantero.

Es apodado “El Guaraní” por los fanáticos del Pérez Celedón, pero cuando recién llegó, lo llamaron de otro modo. Lauro, entre risas, recuerda una simpática anécdota.

“Llegué hace casi dos años y en mi partido debut estábamos perdiendo 2-1. Hubo un penal a nuestro favor.

Pateé yo y me resbalé y se me levantó la pelota al aire. Era el último minuto del partido. Me put… de mil maneras, luego me empezó a ir mejor y logramos el título”, recordó.

Lo que debió hacer por un poco de plata

La vida de Lauro nunca fue fácil. El delantero que tuvo paso por Intermedia y Primera División de nuestro país, también tuvo que hacer trabajos extras para sobrellevar sus gastos.

“Hacía quiniela cuando era mitã’i, luego trabajé en una panadería, me iba a las 5 de la mañana ya. Sé lo que es el sacrificio desde pequeño”, recalcó.

Invita comida paraguaya

En medio de su humildad, Lauro nos contó cómo se maneja con la comida allá. “No extraño el asado ni tampoco la sopa. Acá mi señora prepara de todo. Le suelo invitar a mis compañeros y están locos por la comida paraguaya. Hacemos sopa, chipa guasu, ensalada de arroz con asado ha itavyete hikuái”, tiró.

Paraguay no le dio tanta oportunidad

Lauro llegó a jugar en Silvio Pettirossi, en Sol de América y en Rubio Ñu, luego militó en el Ecuador en equipos como Fuerza Amarilla, Aucas y Técnico Universitario.

El goleador lamentó “que en mi país no tuve tantas chances de destacarme. Acá me están saliendo las cosas, pero no pierdo la esperanza de jugar en el fútbol paraguayo, en alguno de los equipos grandes”.