• Licenciada Rocío Paredes
• Psicóloga Clínica

Mi historia es esta. Cuando yo tenía 15 años conocí a una mujer no en persona sino de vista, nunca le saludé, me enamoré completamente. No sé si me enamoré pero se dice que cuando se le ve a una mujer desde lejos sentís por ella una atracción muy fuerte, y que eso es el amor.

Anteriormente no tenía una vida muy buena. Yo en realidad soy una persona de buen corazón, y siempre es fácil de lastimar a las personas de buen corazón.

No llegué a terminar el colegio, apenas hice hasta el 7.º grado, ni amigos tenía, me sentía muy solitario, y muy enamorado de aquella mujer que hasta su nombre recuerdo ahora, Tamara Beatriz.

A mí me maltrataban en mi casa, tuve que salir, ahora vivo solo en un alquiler, trabajo día y noche, soy albañil, también estoy en la chacra y en la casa, hago todas las cosas solo, cocino, lavo… de todo.

Mi vida sigue no siendo tan buena, solo que ahora tengo 18 años y sigo pensando en ella.

Solo sé que se mudó en Ypané en otro colegio, un lugar que no sé ni dónde queda, en ese tiempo nadie tenía celular, ahora estoy tratando de conseguir su número.

Quiero contactarme con ella para decirle lo que siento, nunca logré acercarme, me costaba hablar, saludar y leer en frente de las personas, me ponía atrás de todos, ocultaba mi cara.

Si alguien me llamaba para leer la Biblia en la celebración de la misa me ponía todo rojo. No sé si es ataque de pánico o ansiedad porque ya leí mucho en internet hay muchas formas de curar, pero no puedo.

La mujer que yo amo se fue lejos, no sé si podría conseguir su número, y si consigo no sé si va a funcionar porque escuché yo, no sé si es cierto, que ella ya tiene novio.

Me siento más triste, no sé qué puedo hacer, estoy buscando una solución porque yo hasta ahora la sigo amando, estuve muy enamorado de ella, porque yo ni hola llegué a decir, no sé qué hacer si rendirme, seguir adelante con mi búsqueda, o si la perdí para siempre, ese es el problema que tengo.

Yo no sé si estoy buscando la paz o encontrarla para conquistarla, es que pasaron casi 4 años, pero no dejo de pensar en ella. MIGUEL, DE SAN JOSÉ DE LOS ARROYOS, 18 AÑOS.

LA RESPUESTA: MÁQUINA DEL TIEMPO NO HAY

Concentrarse en el presente para cumplir con las metas

Hoy en día es fácil encontrar a una persona en Paraguay, si tenés alguna pista, en las redes sociales hay buenos “detectives”, pero antes de hacer esa búsqueda tendrías que pensar bien el para qué.

Hay veces que queremos tener la máquina del tiempo y volver al pasado para enmendar o cambiar algunas, pero eso no es posible por el momento. Todo pasa en tu mente, debes procurar por tu bienestar emocional aquí y ahora.

Para eso podés concentrarte en tu presente, estudiar y salir adelante, dar vuelta la página y proponerte metas en la vida.

En cuanto a tu timidez, debes trabajar para modificar ese miedo a mostrarte como sos, para poder abrirte a las personas sin temor a que te lastimen, deberías acercarte a consultar y empezar un proceso para generar esos pequeños cambios.

Solo dentro de un proceso psicoterapéutico se puede identificar si padeces o no de ansiedad, qué hacer y cómo calmarla o si es un ataque de pánico, en qué momentos te da, y ver si ya requiere de otro tipo de intervención profesional, pero solo con la intención o investigando en internet no se cura, tiene otra forma de tratamiento.

Tenés que acercarte al lugar más cercano donde te puedan brindar asistencia. En algún momento conocerás a una persona para tu pareja.

Si a pesar de lo que te digo sigues insistiendo en tu búsqueda, bajá un poco las expectativas, no se trata de lo que solo uno quiera, sino que sean dos corazones los que coincidan en un mismo plan.

Para el amor no hay edad, pero tu juventud hace pensar que tenés mucho por delante para vivir y soñar, desafíos y dificultades que pasar, de eso se trata la vida de seguir, a pesar de todo.