El líder de una comunidad indígena logró rescatar a la esposa del finado. La doña estaba aún con vida, por lo que fue derivada de urgencia a un centro asistencial

El frío empezó a hacerse sentir en el país y en varias zonas ya con temperaturas bastante bajas a lo que suma el drama de las crecidas. Muchas familias, ante la falta de medios, utilizan los famosos braseros para combatir el ro’y, pero eso a veces tiene trágicas consecuencias.

Días atrás se registraron las primeras dos víctimas del frío, debido a la utilización de braseros dentro de la pieza cerrada. El lamentable episodio ocurrió en una comunidad indígena de la parcialidad de los ayoreo, en la localidad de Campo Loro, en el Chaco.

Según los datos, en la madrugada del jueves Pedui Cutamaraja (47) quiso contrarrestar el frío intenso por lo que fue hasta la humilde cocina en donde preparó un brasero y lo ingresó en el interior de la habitación donde estaban también su esposa y su hijo, Timoteo Cutamaraja, de 12 años. Ambos ya estaban durmiendo cuando el karai dejó el brasero encendido en medio de la pieza, lo que les generó la asfixia.

El líder de la comunidad indígena encontró sin vida al padre y al hijo, en tanto la mujer corrió con mejor suerte, ya que pudo ser llevada a tiempo y con vida hasta un centro asistencial.