No hubo caso con los equipos paraguayos. Santaní tampoco obró el milagro y volvió a caer, esta vez en un incidentado partido ante La Equidad por la cuenta de 2-1, por lo que también se despidió de la Copa Sudamericana.

El equipo de Pablo Caballero no jugó mal pero a algunos jugadores les traicionaron los nervios. Algunos hasta se fueron de mambo y eso le costó caro. El partido fue equilibrado mientras ambos equipos estuvieron completos en cancha.

Increíblemente, algunos peloteros del equipo paraguayo comenzaron a repartir patadas y se le armó la gorda. De yapa, el árbitro tampoco estuvo a la altura y sobre el final del primer tiempo Alejandro Toledo ligó la roja directa y comenzó el embrollo. En el segundo tiempo, la cosa no cambió pero la diferencia numérica fue aprovechada por el cuadro colombiano para marcar a fuego el resultado. Primero con Zapata, quien metió un buen gol y luego Peralta, que liquidó todo. En medio de eso, otro zaparrancho que terminó en las expulsiones de José Cañete y de Pacheco.

Alexis González, quien junto con Fidencio Oviedo fue de lo mejor que tuvo el cuadro del Tapiracuái, hizo el tanto del honor ya en el descuento, para una despedida más decorosa. Inobjetable clasificación de los cafeteros.