Juan Miltos es devoto de la Virgen, quien ya le cumplió varios deseos. El agua llegó hasta su frente, pero tras su plegaria, empezó a retroceder.

Hace un mes aproximadamente que todos los días Juan Miltos (32), poblador del barrio Santa Ana del Bañado Sur, ve a sus vecinos abandonar sus hogares debido a la inundación que llegó de una manera bastante agresiva este año. El agua del río cada vez estaba más cerca del local que alquila allí y donde ahora está viviendo, tanto que ya los amigos le decían que vaya preparando sus cosas para “arribar” con los demás hacia la ruta o las plazas cercanas.

Pero la fe de Miltos fue más grande, ya que hace años que le tiene una devoción enorme a la Virgen de la Rosa Mística y decidió rezarle para que el agua se detenga y no llegue a su panadería. “El agua se quedó enfrente mismo a mi local, pero no llegó a ingresar acá. Yo creo que fue obra de la Virgen porque con mi señora y mis tres hijos (menores) tenemos mucha fe y le oramos todos los días para que el agua no nos llegue. Por suerte ahora ya está bajando de vuelta”, aseguró.

Hace un par de años nomás que don Miltos montó su propia panadería y todo iba a pedir de boca, pero con este tema de la inundación las ventas bajaron muchísimo, pero él decidió no bajar los brazos y “rebuscarse” para por lo menos “salvar el puchero del día”.

“Por día utilizamos entre 100 y 120 kilos de harina y se va todo los panificados que hacemos de esa cantidad en días normales, pero ahora está saliendo 50 kilos por día. Tratamos de remarla, nos comunicamos con los clientes y nosotros les acercamos el producto y así salvamos”, expresó el laburador. “Dios aprieta pero no ahorca y esto es una prueba más de fe”, he’i.

Virgen también le cumplió el sueño de la panadería propia

Hace dos años que Juan Miltos montó su panadería y todo también fue mediante su fe en la Virgen he’i. “Yo era personal en una panadería y soñaba con tener mi propia panadería y recuerdo que hace dos años que estaba en mi grupo de oración y tenía mucha fe y yo le pedía a la Virgen que me cumpla el sueño de tener mi negocio propio”, relató.

“Primeramente abrí este local y en nombre de la Virgen se llama Panadería Rosa Mística. Luego logré abrir en 36 Proyectada y México una sucursal que lastimosamente tuve que cerrar por la inundación, pero pienso volver a abrir”, explicó.